El kilómetro 100 del Camino está aquí

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

1.600 peregrinos salieron este año de Vigo para andar lo justo y ganar la compostela

16 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Arzobispado de Santiago y su oficina del Peregrino ya admiten el centro de Vigo como el kilómetro 100 del Camino Portugués por la Costa. Oficialmente, la distancia mínima para obtener el título de la compostela está situado en el entorno de la iglesia de Valadares pero también se admite como prueba de haber recorrido la distancia mínima el sello de la iglesia de Santiago de Vigo, situada en la avenida de García Barbón, en pleno centro de la ciudad. Es fácil ver sentados a la entrada de los supermercados de esta calle a jóvenes parejas de mochileros extranjeros comprando yogures o comida para llevar en su camino.

Este verano, más de un millar de romeros han elegido la ciudad como punto de partida. En agosto, salieron 516 desde Vigo, lo que equivale al 0,85 % de todos los peregrinos del mes. En el cruce de Gran Vía con Urzaiz o por Príncipe suelen encontrarse estos días forasteros despistados que acaban de llegar a la ciudad para emprender los primeros pasos de su ruta. Hace unos días, tres jóvenes del sur de España, cargadas con sendas mochilas, se apearon en la estación de tren de Urzaiz y pasaron junto al monumento de Los Rederos buscando con el GPS su hostal. Su plan era pernoctar en un hostal y ver la ciudad antes de andar por la costa hacia la tumba del Apóstol.

Tanto el párroco como la Oficina del Peregrino confirman que el centro de Vigo está admitido como kilómetro 100 del Camino Portugués de la Costa, que une Oporto con Santiago. Los caminantes salen de la ciudad por Teis y Chapela, o por la Ruta del Agua, desde la iglesia de los Picos, en O Calvario. Muchos se guían con el GPS del móvil porque no hay flechas amarillas en la ciudad.

Haciendo «shopping»

Las peregrinas jubiladas australianas Nilla, Sandra, Julie y una amiga, vecinas del oeste, de Perth, y la estadounidense Johnnie, de Nueva Orleans, en Luisiana, partieron de Oporto y en una semana llegaron a Vigo. Sellaron su credencial en la iglesia del centro al terminar la misa de las 10.00 horas. «Vamos a Santiago y quizás acabemos en Fisterra. Estaremos en Vigo un día. La ciudad es bonita y podemos hacer shopping. Caminamos 25 kilómetros al día», dice Nilla.

Ser el kilómetro 100 es un imán para los peregrinos con prisa, como ocurre en Sarria, adonde llegan caminantes en trenes y autobuses para iniciar la ruta jacobea en solo cinco o seis días, justo su semana libre de vacaciones. Vigo es otro punto atractivo de partida por estar comunicada por tren, aeropuerto y autobuses, además de bastantes hoteles. Los caminantes incluyen a Vigo en su planificación, ya sea como punto de partida, escala intermedia para pernoctar o vía de escape.

Muchos peregrinos que comienzan en Oporto dejan el camino en Vigo para retomarlo otro año porque agotaron su semana libre. Algunos van directamente a Santiago a tomar el avión de regreso a casa. Ese fue el caso de tres caminantes alemanes que salían de un hotel de A Laxe. Una furgoneta de mochileros les recogió el equipaje. Otros muchos ponen punto final en Vigo. Unas peregrinas americanas que paseaban por Príncipe de compras buscaban tiendas de recuerdos horas antes de tomar el vuelo de regreso. Iniciaron su ruta a pie en Oporto y quieren regresar algún día a Vigo para seguir a Santiago. En Vigo solo pensaban en comprarse una camiseta de la ruta jacobea como recuerdo de su reto.

El número de romeros que inician a pie su búsqueda espiritual desde Vigo se duplica cada año. En el 2014 salieron 274 personas, en el 2015 ya eran 440, al año siguiente se disparó a 967 y en el 2017 se alcanzaron los 1.477, cifra que este año fue superada a finales de agosto. Solo en tres meses, entre el 1 de junio y el 1 de septiembre, salieron 1.036 peregrinos de Vigo. Empiezan en la ciudad uno de cada ocho romeros que siguen el Camino Portugués de la Costa. En agosto, el ránking de la Oficina del Peregrino situó a Vigo entre los 19 localidades más populares de salida en las nueve rutas jacobeas.

¿A qué se debe el auge de peregrinos en Vigo? Al efecto tirón que ejerce la ruta portuguesa por la costa que arranca en Oporto y que pasa por Vigo. El trayecto gana adeptos. En el 2014, solo la completaron 774 personas. En lo que va del 2016, llegaron 2.600 a Santiago. Al año siguiente, fue el triple. Y desde enero, ya abrazaron 8.768 caminantes al Apóstol.

El párroco: «Llegan a la iglesia con incertidumbre por falta de flechas»

El vicario parroquial de Santiago de Vigo, Luis González comentan que «no hay colas pero este año pasaron por aquí muchos extranjeros». Salen de A Guarda, Oia, Baiona o Vigo. «El punto exacto de los cien kilómetros es la iglesia de Valladares pero vale salir de aquí, del centro de Vigo, porque está reconocido en Santiago. Si sellan aquí, llegan allí y le reconocen para darles la Compostela», afirma el sacerdote. Añade que en cualquier iglesia o incluso una oficina de turismo sellan la credencial con la etapa de Vigo. «Lo que pasa es que como esta iglesia es la Santiago de Vigo, para mucha gente es significativo pasarse por aquí», comenta. Una duda de los romeros es sobre «la ruta que deben seguir» porque faltan flechas amarillas. «Llegan aquí con esa incertidumbre, de saber hacia dónde tienen que dirigirse», dice.

«Salí desde Vigo al ver que había avión y aproveché para visitar Cíes»

Estela Navarro (Madrid, 37 años) explica que «inicialmente iba a salir de Tui pero decidí venir desde Vigo porque tenía pocos días por el trabajo. Vi que el avión llegaba a Vigo, que había buena conexión, y que desde aquí se podía realizar el Camino porque era el kilómetro 100 o 101 y me resultaba muy interesante visitar las islas Cíes, lo que hice un día antes de salir». En su hostal, le informaron de que la credencial se sellaba en la iglesia de Santiago de Vigo, aunque fue a la hora de misa y la sacristía estaba cerrada. Eligió la costa, que le llevará cinco etapas, «porque esta zona me pareció muy bonita».