La cifra de heridos tras el derrumbe en O Marisquiño sigue aumentando y llega a 428
VIGO CIUDAD
Un nuevo ingreso registrado la pasada madrugada también eleva a ocho el número de afectados que permanecen hospitalizados
14 ago 2018 . Actualizado a las 11:39 h.«Estamos recibiendo un goteo de gente. Es habitual que las consecuencias de las magulladuras se noten al día siguiente», aclaró ayer a La Voz Felix Rubial, gerente del Área Sanitaria de Vigo. Una razón que puede explicar por qué, según avanzan las horas, la cifra de contusionados por el derrumbe de un pantalán durante la celebración de O Marisquiño siga aumentando. El Sergas ha publicado esta mañana un nuevo balance de heridos que eleva a 428 persoas la cifra de personas que fueron atendidas. También aumenta a ocho el número de afectados que permanecen hospitalizados después de que la pasada madrugada se registrase en el Chuvi un nuevo ingreso. Sanidade recuerda que otros cuatro heridos están no Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, tres en la clínica Povisa y un octavo en el CHUS de Santiago (que fue trasladado desde Vigo por proximidad a su domicilio).
Este nuevo balance de heridos ya se prevía ayer cuando, tras el penúltimo informe de Sanidade, el 061 seguía atendiendo llamadas de contusionados en O Marisquiño que se fueron para sus casas, y pedían saber a dónde dirigirse para ser atendidos.
Personal voluntario
El gerente del Área Sanitaria de Vigo relata que la de ayer fue la tercera vez en solo dos años que se activó en Vigo el plan de catástrofes (los sucesos precedentes fueron el descarrilamiento del tren Celta, en O Porriño, y el estallido de la pirotecnia de Tui). «Tras la alerta del 061, la prioridad fue saber el tipo de pacientes y el tipo de lesiones». Con esa información, se movilizó a las unidades de Urgencias, Radiología, Traumatología, Pediatría y Cirugía. «El personal que estaba de guardia permaneció al acabar el turno, y muchos profesionales se presentaron sin que nadie los llamara», afirma el gerente. Lo mismo ocurrió en los hospitales Povisa, El Castro y Concheiro de Vigo; en los de Montecelo y Domínguez, de Pontevedra; y en los puntos de atención continuada de Vigo y Redondela habilitados para repartir a los centenares de heridos. Tantos los atendidos en centros públicos como privados tendrán los mismos derechos a la hora de una eventual reclamación de daños.
