El Concello mantiene cerrado el párking del Cunqueiro tras acabarlo

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

NPC

De momento no ha encontrado ningún sistema para que solo aparquen los vigueses

13 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«Prohibido el paso a toda persona ajena a la obra», advierte un letrero. Está colocado en una de las vallas que bloquean la entrada del aparcamiento que el Concello de Vigo ha construido junto al Hospital Álvaro Cunqueiro, todas ellas con el logotipo del Ayuntamiento. Lo que el cartel ignora es que la obra ya no existe. Hace más de un mes que la empresa Misturas terminó de construir el párking en el hospital, que el gobierno local ha anunciado en repetidas ocasiones que será gratuito. Los obreros ya se marcharon, ni siquiera hay máquinas que indiquen que los trabajos pueden continuar, las plazas están pintadas y el sentido del tráfico, señalizado. No queda nada por hacer. Sin embargo, el aparcamiento al aire libre continúa cerrado.

El Concello de Vigo viene demorando su apertura desde hace semanas. La obra ya acumulaba retrasos. Comenzó el 24 de mayo del año pasado y tenía un plazo de ejecución de seis meses. Con la obra ya en marcha, la constructora se encontró que el terreno presentaba unos problemas que el proyecto municipal no recogía. El Ayuntamiento tuvo que aprobar un modificado. Fue leve, de 7.200 euros, pero el Concello dio a la constructora Misturas dos meses extras para la obra. Eso situaba su término a principios de marzo. Fue un plazo que incluso el alcalde dio públicamente.

Pero no solo se ha incumplido sino que el Ayuntamiento viene retrasándolo desde hace meses. Las obras llevan ya más de un mes paradas porque están completas. Hay en torno a 400 plazas y todas están ya pintadas. También se han instalado farolas, aceras y unos letreros que indican hacia dónde hay que caminar para acceder a los distintos servicios del hospital. El aparcamiento, cuyo presupuesto ascendió a 545.000 euros, tiene también delimitadas una decena de plazas para discapacitados y un carril de acceso propio desde la rotonda de consultas externas. Si se llega de Vigo, se accede a él por delante de las consultas; si se llega por la VG-20, hay que coger la salida de urgencias.

Pero hay algo que el párking no tiene: barreras. Cuando anunció que haría un aparcamiento gratuito, Abel Caballero avisó de que sería solo para ciudadanos de Vigo. El Concello tenía la intención de exigir la Pass Vigo para entrar en el aparcamiento del Cunqueiro, ya que era obligatorio estar empadronado para acceder a determinados servicios que proporciona esa tarjeta. Pero la decisión del juzgado contencioso-administrativo de Vigo tumbó sus planes. El juez aceptó el recurso del Concello de Redondela contra la exclusión de las personas no empadronadas del bonobús de Vitrasa, a través de la tarjeta Pass Vigo. Por entonces, las obras del párking del hospital de Beade ya estaban prácticamente rematadas. Desde ese momento comenzaron a moverse al ralentí.

Actualmente, no hay ninguna caseta en el nuevo párking que apunte a que allí va a haber un sistema para controlar los accesos. El Concello ha cumplido la decisión judicial a su manera: sigue expidiendo la Pass Vigo para los ciudadanos empadronados en la ciudad, y a los registrados en Redondela y en otros municipios les da un carné llamado tarjeta verde -como el anterior bonobús de Vitrasa- aunque en realidad es de color blanco. De momento, no tiene manera de hacer cumplir su promesa de que los usuarios del párking del HAC sean solo vigueses.

El PP prometió que pediría liberar el aparcamiento de pago y no lo hizo

Aunque no suele recordarlo, la idea de construir un aparcamiento junto al hospital de Vigo en terrenos municipales la lanzó el PP. La presidenta local, Elena Muñoz, presentó la propuesta después de la manifestación que en septiembre del 2015 sacó a la calle a más de cien mil personas en contra del hospital, que entonces estaba en proceso de puesta en marcha. La protesta había cogido fuerza gracias a que el nuevo hospital público de Vigo tenía un estacionamiento de pago, algo que hasta entonces no ocurría. Elena Muñoz descubrió entonces que el Concello tenía una parcela junto al Cunqueiro y retó a Caballero a hacer un aparcamiento allí. El gobierno local primero desdeñó la propuesta y después la acabó adoptando como propia.

Pero mientras el PP presionaba a Caballero, pasaron otras cosas. Una fue que el presidente de la Xunta apoyó la petición de Muñoz y acusó a Caballero de ocultar que contaba con una finca de 15.000 metros cuadrados. Otra fue que Elena Muñoz llegó a lanzar una arriesgada promesa. «En el momento en el que comiencen las obras, pediré a la Xunta que el aparcamiento del Álvaro Cunqueiro sea gratuito para trabajadores y ciudadanos», dijo el 10 de septiembre del 2015 en una rueda de prensa en el Concello.

Caballero no recogió el guante automáticamente. Semanas después, Jesús Vázquez Almuíña se haría con las riendas de la Consellería de Sanidade y ordenaría bajar las tarifas. Al cabo de unas semanas, el alcalde sí adoptó la idea de Muñoz. Pero el PP o bien se olvidó de pedirle a la Xunta que dejase el párking gratuito durante las obras o bien la Xunta no le hizo caso.