Trabajadores de la concesionaria temen que aumente la doble fila en otros viales
07 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El nuevo multamóvil, que tendrá que poner en marcha la concesionaria de la zona azul Dornier en tres meses, no podrá sancionar en calles que carecen de zona azul. Es el caso, entre otras, de Hispanidad, Camelias, Torrecedeira, Pi y Margall, Travesía de Vigo, Gran Vía y Sanjurjo Badía, viales muy conflictivos por la densidad de tráfico y el estacionamiento irregular. Tampoco podrá multar a los vehículos estacionados en doble fila al tener que ceñirse al estacionamiento en zona azul. Esta circunstancia hace prever que su puesta en marcha tenga, mas que nada, carácter recaudatorio. Por el contrario, está por ver si se acentuarán las infracciones como la doble fila en las calles sin estacionamiento regulado para esquivar las multas del vehículo, según sospechan los trabajadores.
«El visioncar dispone de cámara y puede ver si el coche tiene puesto el tique o si pasa del máximo de dos horas establecido. No solo no puede multar la doble fila, sino que tampoco puede actuar en zonas de carga y descarga ni en paradas de autobús, habría que cambiar la ordenanza porque a los controladores no nos corresponde esa función, es de la Policía Local», apunta un representante de los trabajadores de la UGT.
En el pliego de condiciones del contrato, el multamóvil pasaba totalmente desapercibido al denominarse «sistema de supervisión automática de ocupación embarcado en un vehículo». La propuesta de Dornier especificaba que se trata del reconocimiento automático de matrículas que permite en tiempo real la identificación y georeferenciación de los vehículos en zonas ORA. La información obtenida por el vehículo se coordina con el sistema central para realizar la correspondiente comprobación y, en su caso, comunicarlo y proponer la denuncia al vigilante de la zona. Los trabajadores critican el hecho de tenerse que enterar por este diario de la firma del nuevo contrato con Dornier, lo que, a su juicio, indica que no se cuenta con ellos para nada.
«Lo más normal es que te informen. Somos 40 trabajadores, la parte más interesada en que esto funcione», comenta el delegado sindical. Advierte de que una vez firmado el contrato, empiezan a contar los plazos para hacer las inversiones y poner a punto el servicio. «Vamos a estar expectantes porque igual hay cosas que se incumplen desde el minuto uno, tal como se han incumplido algunas en la etapa anterior. Si es así, lo denunciaremos en el Concello y, si hace falta, en los tribunales», añade. Recuerda que solo se pueden eliminar un 5 % de plazas y aumentar hasta un 40 %.
Entre los servicios que controlarán y que Dornier se ha comprometido a ofrecer figuran nueve puntos de recarga para vehículos eléctricos ampliables a dieciocho en el plazo de cinco años. La empresa correrá a cargo de su mantenimiento, pero no de la gestión y explotación. Pondrá entradas USB en los parquímetros para la recarga de teléfonos móviles.
Como sucedía hasta ahora, las cláusulas del pliego de condiciones incluyen que los parquímetros deberán estar situados «normalmente» a una distancia máxima de 50 metros respecto de la plaza de estacionamiento. Este aspecto ha sido denunciado en varias ocasiones por los trabajadores al detectar que se incumplía en algunas calles por diversos motivos, lo que redundaba en pérdida de tiempo para los usuarios y, por tanto, en un mayor coste. Las funciones software que ofrecerán los parquímetros son las propias del servicio: tarifas, emisión de tiques, cancelación de denuncias... Una aplicación móvil permitirá realizar a distancia el pago, aumentar el tiempo de estacionamiento y cancelar las denuncias.
«La concesión está con la espada encima porque hay un recurso en el Tribunal Superior»
La continuidad de Dornier al frente del estacionamiento en zona azul es puesta en duda por los trabajadores. «La concesión está con la espada encima porque hay un recurso en el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia presentado por otra de las empresas que participaron en el concurso», comenta un delegado sindical. Advierte que, aunque el recurso no paraliza el contrato, puede pasar como sucedió en Huelva, que el Tribunal Contractual falló en principio a favor, pero el Superior de Andalucía lo hizo en contra y la concesión tuvo que cambiar de manos.
En un sentido similar se expresa el grupo Marea de Vigo, para quien «existe demasiada tranquilidade e confianza no goberno municipal ao non cuestionarse o que acontecería de saír adiante o recurso no TSXG». Entiende que en la actualidad la concesión está en el aire y se pregunta lo que pasaría de salir el recurso adelante si ya se ha llevado a cabo la inversión contemplada en el contrato.
El concejal Xosé Lois Jácome advierte que no pueden desviarse recursos del contrato del Ayuntamiento de Vigo para atender concesiones en otros concellos, tal como supuestamente pudo acontecer con anterioridad. Insiste en que el multamóvil solo puede actuar en la zona azul.
Marea de Vigo recuerda lo que pasó con la concesión municipal de Parques y Jardines, en la que se sucedió un baile de empresas con unas consecuencias nefastas, tanto para la ciudadanía como para ese servicio y el personal de la empresa. Teme que se pueda repetir al existir una rebaja en la concesión del 30 %.