El Concello legaliza la pantalla de la rotonda y abre la puerta a instalar más

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Las emisiones de LED no podrán tener sonido ni deslumbrar al conductor

01 jun 2018 . Actualizado a las 14:18 h.

El Concello de Vigo ha tardado casi un año en legalizar la rotonda con pantalla situada en Rosalía de Castro. Urbanismo ha aprobado la modificación de la ordenanza reguladora de publicidad exterior que contempla este nuevo soporte publicitario. Así, se ordena que la publicidad tendrá que estar apagada desde las 21.00 a las 10 horas, salvo que se autorice expresamente en períodos festivos (como las Navidades o fiestas de Vigo) o en casos especiales fuera de este horario.

La nueva normativa, que tendrá que ser publicada por el Boletín Oficial de la Provincia, prohíbe instalar pantallas en el Casco Vello y en la fachada de edificios protegidos. Pero abre la puerta a que se instalen más en la ciudad.

Hace casi un año, el 13 de julio del 2017, Vigo estrenó en Rosalía de Castro una rotonda con una pantalla LED de cinco metros que se convirtió en centro de atención y polémica porque se aseguró que ponía en peligro a los conductores. De hecho, Marea de Vigo sigue manteniendo que este tipo de publicidad va contra el reglamento general de circulación.

En estos meses, los conductores y viandantes se han ido acostumbrando y ahora apenas llama la atención a los vigueses. En este período de tiempo la pantalla se ha convertido en soporte de anuncios publicitarios sobre la candidatura de las islas Cíes o también informa sobre el tiempo.

Las nuevas tecnologías han obligado al Concello a actualizar una ordenanza de publicidad exterior que estaba obsoleta, puesto que databa del año 2003. «Ante a evolución tecnolóxica estimase necesario introducir na ordenanza a regulación destes novos soportes», señalan desde el Concello. Varias empresas privadas les consultaron sobre su viabilidad y así se puso en marcha. La ordenanza establece que todos los soportes de este estilo que se instalen en el futuro en la calle y en bajos comerciales tienen que tener un mando cerrado accesible para los operarios municipales que puedan apagar la pantalla en cualquier momento.