Los votantes del PP conceden un bien a la gestión del gobierno local y suspenden la estrategia de su opción política

Carlos Punzón
c. punzón VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

21 may 2018 . Actualizado a las 12:05 h.

El perfil político de Abel Caballero se acerca al notable en la valoración de los vigueses, y su gestión como alcalde, también. El regidor olívico merece una nota de 6,74 puntos sobre diez en su trabajo al frente del Ayuntamiento, a juicio de los encuestados por Sondaxe para La Voz de Galicia. A falta de un año para que se someta a su tercera comparecencia en unas elecciones municipales, supera incluso en 0,17 puntos la nota lograda en el ecuador del mandato.

Y si relevante resulta que los votantes del PP otorguen más nota a Caballero que a Elena Muñoz en liderazgo político, aún lo es más que los que optaron por la candidata del PP en el 2015 estimen que el trabajo del alcalde es merecedor incluso de un bien, mientras que a quienes encarnan su propia opción política solo le conceden un 4,74 en gestión y estrategia como principal partido de la oposición.

Tras once años de mandato al frente del consistorio ya no hay seguidores de ningún partido que no consideren al menos como aceptable el trabajo del socialista, siendo los electores del PP quienes mejor valoran su gestión. Los votantes de Marea de Vigo, grupo con el que Caballero y su gobierno apenas coinciden en el sentido de voto en los plenos y comisiones municipales, le llegan a dar también una nota de un 5,86, baja a un 5,52 en el caso de los del BNG, y a 5,25 en el de Ciudadanos, dando muestras del alto grado de transversalidad que ha logrado en la ejecución de su tarea de gobierno local. Y una posible pista respecto al sentido de voto que pudieran llegar a dar quienes no optaron por ninguna candidatura hace tres años viene dada por la puntuación que a la gestión de Caballero dan los abstencionistas (un 6,25) y los que votaron en blanco (5,71).

Los electores de Ciudadanos son los más generosos a la hora de puntuar la puesta en escena como oposición del PP, pero no llegan a darle el aprobado (4,52). La bolsa de votantes de las demás opciones políticas se quedan por debajo del 3 al juzgar el guion que siguen los siete concejales populares, lo que les deja con una nota media final de solo un 2,97.

A Marea de Vigo solo le conceden el visto bueno sus propios votantes (con un 5,22), aunque mantienen ciertas expectativas entre los abstencionistas, lo que explicaría su ascenso de tres a cuatro concejales a día de hoy, según el trabajo demoscópico de Sondaxe. Su nota media se sitúa en un 3,96, quedando igualmente lejos del aprobado.

Apoyo en los extremos

Por edades, la gestión de Abel Caballero es más valorada por los dos grupos contrapuestos de la pirámide electoral. Los mayores de 65 años dan de media al alcalde una puntuación de 7,14 y los electores más jóvenes, un 6,86.

En el caso del PP, aunque ningún joven haya manifestado su intención de darle su voto el año que viene, encuentra en los grupos de menor edad la franja más comprensiva con su actuación en la oposición, aunque para alcanzar únicamente un 3,34 en valoración.

El grupo joven es también el nicho de mayor fidelidad de Marea, y el único que llega a aprobarle, con un 5,17.

La gestión de Caballero es más valorada en el eje Bouzas-Castrelos, al igual que en el caso de Marea de Vigo, y en el del PP su mejor nota la obtiene en el sur de la ciudad.