La ría de Aldán no es una ría y en cien años no tendremos playas

Begoña Rodríguez Sotelino
b. r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

GUSTAVO RIVAS

El geólogo Juan Ramón Vidal Romaní celebra el «Geolodía» el domingo con un paseo por los arenales de O Morrazo

12 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El geólogo de la Universidad de A Coruña Juan Ramón Vidal Romaní es uno de los impulsores de los actos del Geolodía 2018, que organiza en todo el país la Sociedad Geológica de España y en la provincia de Pontevedra se celebrará este domingo con una ruta abierta al público que comienza a las 9.30 horas en la playa de Menduíña y tendrá como objeto descubrir la ría de Aldán.

El experto estará allí para explicar in situ cómo nació y qué la hace tan especial, junto a sus compañeros Marcos Vaqueiro y Rei Costas. La periodista Bibiana Villaverde lo entrevistó ayer en el programa Voces de Vigo de Radio Voz y añadió que se trata de ver cómo se genera el paisaje actual en Galicia. «La gente se fija en poco más que en como sube y baja la marea, no piensan que si se formó por erosión marina o no. De hecho lo más común y cabal es no pensar en nada de eso y disfrutarlo», señala con humor.

Pero a través de jornadas como esta lo que se pretende es hacer demostraciones didácticas viendo un ejemplo muy concreto, «un espacio pequeño en el que andando podemos ver todo lo que necesitamos», aclara. La elegida es la ría de Aldán, «que en realidad, aunque se llama así, no es una ría porque no está generada por la erosión de ningún río, pero sí es un entrante profundo en la costa de la ría de Pontevedra», afirma.

Tras estudiar las características del sustrato, aprecian los investigadores que hay en la zona distintos espacios habitados por el hombre «donde vivían hace siete o doce mil años». La visita servirá también para analizar cómo aprovechaban la estructura de la roca y cómo ha evolucionado la ría.

El profesor señala que cuando la gente piensa que el mar es el causante de las catástrofes que se llevan por delante todo lo que encuentra a su paso, se equivocan. «El mar no tiene la culpa ni del 99 % de los rasgos que vemos en la costa salvo en las playas, que las está destruyendo al subir el nivel del mar. En el resto, el relieve que vemos es muy antiguo. Por ejemplo, la playa de Las Catedrales tiene 135.000 años por lo menos y en el caso de la ría de Aldán hablamos de lo mismo, formas de costa muy antiguas hechas en roca que el mar apenas ha retocado». Juan Ramón Vidal apunta como elemento de interés que los asistentes vean las viviendas en las Rías Baixas hace quince o veinte mil años, que hacían suyas aprovechando huecos hechos de forma natural y aún hoy se usan para protegerse de los temporales». El investigador recuerda, por otra parte, que las Rías Baixas son las más antiguas de las gallegas. «Se empezaron a formar hace cien millones por la erosión de los primeros ríos, excavando cauces en roca formando el peculiar paisaje de las rías no por el hundimiento de fallas, sino por esa excavación durante millones de años», cuenta. El investigador añade que cuando los ríos gallegos empiezan a surgir, no existe el resto de España, «Solo hay una isla que comprende el norte de Portugal y Galicia es decir, que Galicia existió antes que la península ibérica».

Su afirmación se acompaña de otras ideas más preocupantes que traslada el geólogo al ser preguntado sobre el estuario de A Guarda, que se destruye a pasos agigantados. «El nivel del del mar sube y en los últimos 15.000 años, más de 40 metros. Cuando se encuentra el mar con costa de arena, desaparece. El mar la destruye de forma acelerada y brutal, probablemente tengamos menos de cien años de playa, así que hay que aprovechar», comenta.

La descripción del científico es tajante: «Todo lo que esté construido sobre playa o arena desaparecerá, aunque haya un bosque encima. El problema no se resuelve de ninguna manera. No se puede hacer nada, bueno, sí, gastar dinero, pero es mejor que me lo den a mí que lo usaré mejor, porque para ese fin, es tirar dinero al mar a manos llenas», afirma.

Vidal subraya que la advertencia que hace no se refiere solo al estuario del Miño sino a toda la costa. «Por ejemplo, la playa de Rodas, en las Cíes, tiene muy pocos años de vida. No se puede parar», Después de esto, el profesor dice que no quiere ser alarmista, pero añade a continuación que como además hemos construido las ciudades y poblaciones al borde de las playas, el agua llama a la puerta de las casas. Pedir a Costas unos metros cúbicos de arena para rellenar no vale para nada», concluye