Guardesiña ya nada por aguas del Gran Sol

VIGO CIUDAD

cedida

La pequeña foca duplicó su paso tras dos meses de cuidados intensivos por parte del Cemma, que ha recuperado 33 mamíferos marinos

05 may 2018 . Actualizado a las 18:19 h.

Ya nada por aguas del Gran Sol una foca que tiene nombre. Este rasgo de humanización le sucede solo a ciertos animales que combinan la suerte y la desgracia. La de quedar varados en la costa de Galicia y la de ser rescatados por la Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos, Cemma, una entidad ambiental que lleva más de 25 años trabajando en la conservación de la vida en nuestro mar.

Desde 1999, Cemma mantiene un convenio con la Xunta de Galicia para el rescate de cachalotes, focas, toniñas o delfines que aparecen en el litoral gallego. Y en su centro de recuperación de Nigrán consiguen pequeños milagros como el de Guardesiña, que acaba de viajar hasta el mar de Irlanda a bordo del pesquero Patricia Marta, que no es la primera vez que enrola a estos peculiares pasajeros.

En dos meses de cuidados intensivos, desde que apareció en unas rocas en A Guarda, la pequeña Guardesiña logró duplicar su peso. Y fortalecerse para volver al océano. Su éxito supone el número 33 desde que Cemma inició este servicio.

Además de su tarea de rescate, esta organización investiga y publica trabajos científicos. También es fundadora de la Sociedad Española de Cetáceos y miembro de la European Cetacean Society. Así que, desde una modesta finca en Nigrán, donde a pulso han construido un centro de recuperación, Cemma hace una labor enorme. Porque también sanan nuestras conciencias frente al daño que le hacemos al mar. La foca Guardesiña ya nada por el Gran Sol. Y por aquí, cuando cumple 25 años de actividad, hay una coordinadora que hace tiempo que se va mereciendo un premio.