«Llevamos dos meses casi sin trabajo, con solo un 20 % de lo normal, por la huelga judicial»

José Antonio Fandiño Carnero (Vigo, 1959) es el nuevo decano del Colegio de los Procuradores de Vigo. Asume el cargo con varios frentes abiertos como la huelga de funcionarios judiciales que dura casi dos meses, la adaptación al expediente digital en la Justicia, la creación de un colegio virtual y la ley ómnibus, que liberaliza la profesión y que genera «competencia» poco ética.

-¿Cuáles son sus proyectos estrella para este mandato?

-Queremos revitalizar la figura del procurador y que los ciudadanos sepan que somos un elemento esencial e imprescindible del proceso y un dinamizador del procedimiento. Si no existiese, habría que crear un abogado de juzgados o procesal. Por ejemplo, el procurador podría jugar un papel en los juzgados de lo penal para presionar en el pago de las indemnizaciones o embargos para acortar los tiempos muertos por los retrasos por colapso.

-¿Cómo le está afectando al colectivo la huelga judicial?

-Llevamos dos meses prácticamente sin trabajo, se ha reducido a un 20 o 30 % respecto a antes. Esta huelga es un asunto típico que habría que llevar por mediación para salvar las diferencias entre las partes.

-El sistema para enviar escritos por vía telemática, LexNet, les da bastantes problemas.

-Fue un avance importante pero no se ha hecho todo correctamente. Galicia y Pontevedra son punteras. Las notificaciones se hacen bien pero el envío de escritos no. Es dramático cuando se acaban los plazos de gracia para entregar una demanda y se cae el sistema y no te da un justificante. Buscamos soluciones informáticas para que esto tenga una mejor funcionalidad para que todo sea ahorro y eficiencia.

-¿En qué consiste el proyecto de hacer un colegio virtual?

-Vamos a hacer una página web donde los colegiados puedan interaccionar y conocer las novedades legislativas. Antes ibas a las oficinas a enterarte.

-¿Les perjudica la ley ómnibus?

-Sí, porque sufrimos la competencia de grandes despachos que rozan casi la ilegalidad e infringen el código deontológico. En vez de un procurador de calidad y proximidad buscan uno que sea barato sin ejercer bien esa función de mandato.

-¿Hay procuradores «low cost»?

-Están por toda España. Lo ideal es no llevar más asuntos de los que uno pueda pero ahora se da la situación de llegar a sala y que allí esté el sustituto, del sustituto del sustituto de un procurador de Madrid que lleva pleitos aquí y en Canarias que no conoce al cliente. No vienen a Vigo, firman la demanda y la tramitan aquí buscando sustitutos o nombrando a otros. Se trata de que el profesional que vaya a la sala aporte sus conocimientos, asista al abogado, colabore con la Administración, sepa dónde está el documento o si ha sido citado el testigo. Sin ese valor añadido que damos, se desvirtúa todo.

«De nada valen muchas pantallas o el papel cero si no funcionan»

José Antonio Fandiño, que lleva 35 años en la profesión, defiende un papel más activo del procurador en los juzgados de lo penal. Sería una figura clave a la hora de averiguar y localizar bienes de un deudor para facilitar su embargo sin esperar a que el tribunal tenga tiempo para hacerlo. «En Vigo los juzgados están colapsados y hacen falta medios», dice.

-¿Hay alguna petición clave de los procuradores en Vigo?

-Tenemos tratar de que los sistemas funcionen. De nada vale que pongamos muchas pantallas y mucho papel cero si no funciona a pesar del esfuerzo del personal.

-¿Cómo ve la resolución de cláusulas suelo?

-Que se haya dotado un magistrado más lo va a agilizar. Un juez no puede asumir 4.000 sentencias, ni tampoco el doble o triple.

-¿Peticiones para Vigo?

-El juzgado de violencia de la mujer tiene retrasos, la Audiencia necesita un magistrado, Primera Instancia precisa medios y lo Social, un refuerzo.

-¿Y qué medidas propone para las mujeres procuradores?

-Por ejemplo, cuando dan a luz no tienen un período de baja pero las notificaciones le siguen llegando. Si no las recoge, es su problema. Hace falta solucionarlo.

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