El presidente del clúster de la automoción pide más implicación de las empresas en la aceleradora de I+D

s. a. g. VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

14 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Juan Lloves, presidente del clúster de automoción de Galicia (Ceaga), aprovechó ayer el acto de clausura de las jornadas para la transformación digital de la industria del automóvil para hacer un llamamiento a la colaboración entre los distintos agentes del sector, sobre todo empresas y centros tecnológicos, pero también las universidades, para garantizar la pervivencia de una actividad estratégica en Galicia.

La unidad, sobre todo a la hora de «construir la visión de empresa que queremos» es lo que a su juicio posibilitará esa pervivencia. «La tecnología se compra, pero la visión no se puede comprar», sentenció.

En ese sentido, lamentó que después de casi dos años de andadura (arrancó en septiembre del 2016), algunos todavía no conozcan la aceleradora de I+D de automoción, Business Factory Auto. «Si una empresa del tamaño de PSA ha puesto en ella su foco y le presta tanta atención es por algo», dijo, antes de invitar al auditorio, cuajado de responsables de innovación de medio centenar de firmas, a «participar más activamente» en un proyecto concebido como una de las patas fundamentales del plan estratégico del clúster. «Tenemos que ser actores principales de la transformación en Galicia, que tiene que empezar por el viaje de la digitalización, y fomentar el trabajo conjunto», defendió.

El acto contó también con la presencia del director de PSA, Frédéric Puech, que invitó a los asistentes a «poner en común experiencias para afrontar juntos la transición y contribuir cada uno en la medida de sus posibilidades a definir la hoja de ruta de la automoción gallega hacia la industria 4.0». Ceaga, añadió, ha comprendido esa necesidad de avanzar hacia la «imparable» cuarta revolución industrial, de ahí su empeño en impulsar un sistema colaborativo, también con los centros del conocimiento, como eje del plan sectorial para afrontar con garantías los retos a los que nos enfrentamos. «Estamos construyendo una nueva industria, profundamente distinta a la que conocemos, y tenemos que hacerlo a gran velocidad, atentos a lo que pasa a nuestro alrededor porque todo va muy deprisa», señaló.

Coincidió con Lloves en que «el impulso que seamos capaces de imprimir a la digitalización va a marcar la más importante ventaja competitiva». Se mostró convencido de que el espíritu de colaboración de Ceaga, que agrupa a 116 empresas, se convertirá en la fuerza que necesita el sector para liderar el cambio. «De nuestra capacidad depende el futuro de la automoción en Galicia. Con el tiempo apreciaremos la importancia del trabajo hecho», aseguró.

Finalmente, el director del Igape, Juan Cividanes, subrayó que si algo ha definido históricamente al sector en Galicia ha sido su apuesta por la innovación. En este sentido, recordó que Citroën montó el primer autómata en Vigo en 1978 y apenas dos años más tarde el primer robot con capacidad de movimiento. Destacó el liderazgo de las empresas de automoción en la transformación tecnológica y puso a la Business Factory Auto como ejemplo de iniciativa pionera en el ámbito de la innovación, abierta en este caso al emprendimiento. Finalmente, recordó que el Plan Galicia Innova 2020, persigue situar a Galicia como un territorio de referencia para innovar.