Este no es el escudo de Vigo (aunque presida el Ayuntamiento)

La Voz

VIGO CIUDAD

Oscar Vazquez

El blasón de Praza do Rei tiene un error que incumple la ordenanza municipal de símbolos

13 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

L o parece, pero no lo es. El escudo de Vigo que luce a la entrada del ayuntamiento contiene un error de bulto que se mantiene así desde hace más de cuarenta años. Fue instalado en 1977 y, desde entonces, sin duda han existido otras urgencias. Pero no deja de ser curioso que el principal blasón de la ciudad sea incorrecto.

Porque escudos de Vigo ha habido varios a lo largo de la historia. Alguno incorporaba la concha de vieira de la mitra compostelana. Y otros lucían una hoja de palma. Pero, desde el 7 de abril de 1987, el blasón de la ciudad quedó descrito legalmente por acuerdo del Pleno municipal. Resumiendo, tendría una torre almenada con puerta en arco de medio punto y dos «ventanas cuadrilongas» a ambos lados.

Este castillo estaría ceñido, por la parte izquierda, por un olivo con el tronco marrón. Y tan singular conjunto flotaría sobre un mar «de seis franjas ondeantes de azul marino». Hasta aquí, todo más o menos bien, aunque las «seis franjas» parezcan un mar revuelto con forte maruxía.

Además, la torre de este escudo tiene dos puertas (quizá la segunda sea la del servicio) y cuatro ventanas, lo que hará el interior mucho más luminoso, dónde va a parar... Si nos fijamos bien, incluso hay un simpático ventanuco en lo que parece una buhardilla. Así que, como castillo, está para entrar a vivir. Pero se parece poco al que aparece descrito en la ordenanza.

El acuerdo de 1987, adoptado por unanimidad, incluye también una cinta en plata con el lema «Fiel, leal, valerosa e sempre benéfica cidade de Vigo». En el escudo que figura en el ayuntamiento, este texto aparece en castellano, lo cual es un error, porque debe figurar tal y como está descrito. Tampoco se traducen los lemas cuando están, por ejemplo, en latín.

Pero vayamos ahora al error de bulto. Que está en la parte superior, donde vemos una corona. La norma aprobada en 1987 dice: «En el timbre, corona real, cerrada, en oro». Pero, en el principal blasón de la ciudad, la corona parece de las que vienen con el roscón de Reyes.

Una corona real tiene que lucir estas características: «Está formada por un cerco o círculo de oro y enriquecido de piedras preciosas. Suele estar decorada con ocho florones con forma de hojas de apio, interpolados con ocho puntas de oro más bajas, terminadas en perlas e igual número de diademas de oro y cargado de perlas, rematadas con un orbe cruzado situado encima». Nada que se parezca a lo que aparece luciendo en la Praza do Rei. Sin embargo, sí tienen una corona real de estas características los escudos que lucen en los taxis de Vigo o en los autobuses de Vitrasa.

En realidad, lo que en 1977 colocaron sobre el escudo de Vigo parece una corona de infante. O una «corona real abierta», que no se utiliza en España desde el siglo XVI. Actualmente, sólo existe una monarquía en el mundo que la use: la de Bahrein, estado del Golfo Pérsico donde manda el Rey Hamad bin Isa Al Jalifa. Es el único monarca del mundo que todavía lleva corona «descapotable». Por aquí cerca, no existe corona parecida desde hace más de quinientos años.

Así que el escudo que preside nuestro ayuntamiento es bonito, peo no es el escudo de Vigo. Falla en el mar arbolado, en la traducción al castellano y en el diseño arquitectónico del castillo. Pero, sobre todo, en la corona que lo preside, que ni es real ni se le parece.

Como es lógico, todos esto carece de la menor importancia. Pero queda aquí apuntado para mayor gloria de los símbolos de nuestra ciudad. Y para subrayar que lo más obvio acostumbra a estar delante de nuestras narices.

eduardorolland@hotmail.com