Vigo concentra el 43 % del valor de los buques contratados en toda España

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vazquez

La firma de 11 unidades en el 2017 consolida la construcción naval en la ría

22 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La estadística de construcción naval en España que ayer hizo pública el Ministerio de Industria, confirma la buena salud del naval vigués, sobre todo en lo que al tamaño de los buques contratados se refiere. Y es que si bien es cierto que en número de unidades es la factoría asturiana de Armón, con un total de 18, la que ocupa el primer lugar del ránking, no es menos cierto que sus 28.788 CTG (arqueo bruto más valor), las supera con creces el crucero encargado a Barreras por la división naval de la americana Ritz-Carlton, con 43.217 CGT, lo que le convierte en el buque no solo más grande, sino también de más valor de los contratados en España el pasado año.

En conjunto, los 11 nuevos pedidos del naval vigués concentran el 43 % del valor de los barcos contratados en toda España, que se reparten de la siguiente forma: 3 Armón -un arrastrero para Namibia, un oceanográfico para Suecia y un pesquero para el armador español Celexus-, 2 Freire -sendos oceanográficos para Arabia Saudí y Kuwait-, 1 Barreras -el crucero de Ritz-Carlton-, y 5 Nodosa (Marín), en este caso pesqueros para España, Alemania y Reino Unido.

Pero la cartera de pedidos de las factorías viguesas incluye varias unidades más, firmadas en el 2016 pero aún en fase de construcción. Es el caso del ferri de Vulcano, de los dos multipropósitos que Cardama firmó con Angola y Senegal o del pesquero que construye Metalships para Groenlandia, lo que propicia que, por primera vez desde que estalló la crisis del tax lease, todos los astilleros de la ría tengan actividad.

Con todo, la estadística que ayer hizo pública el Ministerio de Industria ya se ha quedado obsoleta tanto en lo que se refiere a Armón como a Freire. Ambos astilleros ya han sumado nuevos pedidos en sus respectivas carteras. En el primer caso, la armadora argentina Moscuzza, que está en plena fase de renovación de la flota, rubricó el encargo de dos pesqueros de fresco el pasado 1 de febrero, coincidiendo con la entrega del José Américo, la primera unidad encargada por la citada compañía a un astillero español. Por otra parte, Armón confía en que «en breve» entren en vigor los cinco pesqueros que le adjudicó Pescanova. En cuanto a Freire, tiene dos superarrastreros para Groenlandia.

Metalships también se ha garantizado este año nueva carga de trabajo tras encontrar comprador para el casco del superyate Sea Cloud Hussar que trajo de Marín cuando Factoría Naval echó el cierre y el nuevo inquilino de las instalaciones, Nodosa, dijo que no quería allí el buque. Metalships le hizo un hueco en Domaio y, de paso, un favor al banco que se había quedado con él como principal acreedor de Factoría Naval.

Vulcano, que prevé entregar el ferri a finales de abril, es el astillero que más prisa tiene por cerrar algún contrato. Consciente de que se le acaba el tiempo, reforzó el pasado mes la oficina comercial.