«Lo que pide Vigo es cometer un delito medioambiental»

EFE, La Voz

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

La Xunta apuesta por el bombeo del Verdugo para agarantizar agua a Vigo y descarta el azud. Caballero insta a dar la solución que se ejecute en menor tiempo posible

24 nov 2017 . Actualizado a las 19:58 h.

El director general de Aguas de Galicia, Roberto Rodríguez, ha asegurado hoy que lo que piden Vigo y otros municipios del área, reducir el caudal ecológico sin antes agotar otras medidas de ahorro, es que la Xunta cometa un delito ambiental para «tapar las vergüenzas» de su «incapacidad» ante la sequía.

«Eso, ni la Xunta ni los funcionarios lo van a hacer», ha afirmado Rodríguez antes de plantear a los alcaldes de los municipios del sur de Pontevedra afectados por la sequía que se siga ahorrando y dos alternativas para bombear agua desde el río Verdugo hasta la entrada del sistema de abastecimiento en alta de Vigo.

Rodríguez ha criticado la «deslealtad», «improvisación» e «irresponsabilidad» de Vigo, con su alcalde, Abel Caballero, a la cabeza, y ha insistido en que todos los municipios deben certificar qué medidas han adoptado y sus efectos, y que «no hay nada más que puedan hacer» antes de «quitarle al río el agua que es suya».

En este sentido, considera que «hay margen» para conseguir un mayor ahorro, como por ejemplo reducir la presión, y ha añadido que una rebaja del consumo de un 25% «no es nada descabellado» y elevaría la garantía de abastecimiento de Eiras hasta los 160 días.

Ha abundado en que no queda descartada la reducción del caudal ecológico, pero ha reiterado que más allá de titulares de prensa los municipios deben aportar informes, lo que de momento solo han hecho los ayuntamientos de Nigrán y Vigo y el Consorcio de Aguas del Louro.

Cree el director de Aguas de Galicia que lo que Vigo pretende es «séqueme el río, Xunta de Galicia, porque no tengo intención de tomar ninguna medida seria de ahorro y quiero salir de esta situación de sequía sin enterarme»; lo que en la práctica, ha dicho, supone pedir «que se cometa un delito».

Ha recalcado que cuando se solicita reducir el consumo de agua en las industrias «no estamos pidiendo cerrar empresas», y ha añadido: «no caigamos en la demagogia en un asunto tan serio».

Ha puesto como ejemplos la resolución del Consorcio de Aguas del Louro de reducir en un 20% el consumo de más de 80 empresas y la decisión de Ence de renunciar a la mitad del agua que tiene concedida en captación.

Roberto Rodríguez ha enfatizado que cuando se gestiona el ciclo de agua se hace «para lo bueno y para lo malo», y que el Ayuntamiento de Vigo tiene que responder del abastecimiento a la población «a las duras y a las maduras».

Ha subrayado que el Plan Hidrológico de Galicia Costa establece que el abastecimiento de las personas es lo primero; luego, el caudal ecológico; los usos para ganadería, agricultura y acuicultura; los aprovechamientos hidroeléctricos; otros usos industriales; y por último, los usos recreativos.

Preguntado por qué en 2011, cuando hubo otro episodio de sequía, la Xunta accedió a reducir el caudal ecológico en Eiras a 150 litros por segundo, ha alegado que entonces no estaba vigente el citado plan, aprobado por real decreto en enero de 2016.

El director de Aguas de Galicia se ha preguntado si un plan de sequía como el de Vigo puede considerarse «serio» si la prohibición del lavado de coches solo se contempla «en situación de emergencia», y ha considerado que las medidas restrictivas adoptadas por esta corporación han llegado «tarde y mal».

También ha criticado que no se hayan realizado inversiones desde 2011, cuando se renovó la concesión del ciclo del agua, que se hayan traducido en «una mayor garantía de abastecimiento».

«No se invirtió en la potabilizadora ni en ese azud que parece la solución mágica, pero que se descartó entonces porque no era una actuación estratégica ni vale para una emergencia», ha resumido el director de Aguas de Galicia.

Sobre las dos alternativas planteadas por la Xunta para bombear agua del río Verdugo hasta la entrada del abastecimiento de Vigo en alta, ha indicado que ambas tienen un plazo de ejecución de tres meses y un coste previsto de entre cinco millones y cinco millones y medio de euros.

Rodríguez ha recalcado en este punto que la concesionaria que abastece al área metropolitana de A Coruña, Emalsa, va a asumir una obra de entre 8 y 9,5 millones para garantizar el abastecimiento de la población en el futuro, y también una obra de emergencia de bombeo similar a la que ahora propone para Vigo.

Ha añadido que la Xunta «no va hacer en Vigo menos de lo que ha hecho en otras cuencas. Va a estar ahí y aportará cofinanciación en términos similares a lo que hizo en otros sitios, pero no puede ser mirar para otro lado, ahí me las den todas, y que venga otra administración a hacer lo que a mí me toca!, ha zanjado.

Finalmente, ha apuntado que la solución estratégica de abastecimiento para Vigo y su área pasaría por bombear directamente del río Miño.

Por la tarde, en rueda de prensa, Abel Caballero recordó que el trasvase era una medida que había comprometido la propuesta Xunta hace años. El alcalde de Vigo instó al Gobierno autónomo a que dé una solución cuanto antes para garantizar el suministro de agua a la población de la mayor ciudad de Galicia.