El alcalde muestra su preocupación por «lo que puede pasar» ante la negativa de Feijoo a acometer un azud para la presa de Eiras
17 nov 2017 . Actualizado a las 19:59 h.El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha arremetido hoy contra la Xunta por su actitud «negligente» con respecto a la sequía y no hacer caso a su petición de un azud para la presa de Eiras y reducir el caudal que vierte a los ríos, lo que ha vuelto a reclamar.
Además, ha responsabilizado al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de «lo que puede pasar en la ciudad» si se agrava la actual situación de sequía.
Caballero ha revelado que la Xunta accedió a reducir el caudal saliente de la presa de Eiras a 150 litros por segundo en 2011, cuando la situación de hoy es «mucho peor» que entonces, y ha añadido que solo con esta medida se lograría un ahorro del consumo en un cincuenta por ciento frente al diez por ciento que pide Aguas de Galicia.
«Nos dice que tiremos al río y desperdiciemos 445 litros por segundo», ha abundado sobre la posición de la Xunta cuando el consumo de Vigo es de mil litros por segundo.
«Cada uno puede pensar -que la razón de la negativa de la Xunta a esta medida es- porque son ineptos, negligentes o por política», ha proclamado Caballero, quien ha añadido: «se puede tener la tentación de pensar qué pretende» la administración autonómica.
Sobre la recomendación de Aguas de Galicia de que antes de tocar el caudal ecológico se debe reducir el consumo de agua que no resulte indispensable, como el de las industrias, ha dicho que las empresas de Vigo son «muy responsables» y vienen ahorrando desde hace años.
Caballero ha recalcado que los municipios del área de Vigo pueden ahorrar consumos «pero no va a ser suficiente», y por eso ha insistido en el proyectos de construir un azud para aumentar la capacidad de almacenamiento de la presa de Eiras para situaciones de sequía.
Ha indicado que hay dos opciones, una más barata, la conexión de los ríos Oitavén y Verdugo, que costaría cuatro millones de euros, y otra más cara, de veintiún millones, para unir el Verdugo con la presa de Eiras.
Mientras, el PP de Vigo ha trasladado un mensaje diametralmente opuesto al advertir uno de sus concejales, Miguel Fidalgo, que «si la ciudad se queda sin agua», Abel Caballero «será el primer responsable».
Fidalgo ha recordado que Vigo lleva catorce meses en situación de prealerta y hasta hace unas semanas el alcalde «no hizo nada» por paliar la situación; es más, se instalaban macrotoboganes acuáticos y se baldeaban las calles todos los días, algo que, ha denunciado, se sigue haciendo puntualmente.
El edil popular ha planteado como medida prioritaria modificar el recibo del agua, ya que la tarifa actual, con un tramo fijo de 30.000 litros cada dos meses que el noventa por ciento de los hogares no consume «ni de lejos», además de «una burrada» y «un robo» no invita a un «consumo responsable» ni incentiva el ahorro, ha expuesto.