Los bomberos crean una brigada especial para combatir la velutina

Javier Romero Doniz
JAVIER ROMERO VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

CEDIDA

Tienen medio centenar de nidos pendientes de retirar, algunos desde septiembre

17 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La avispa velutina llegó a Galicia en el 2014 para quedarse. Las campañas de retirada y exterminación, desde entonces, no han frenado la población de este insecto depredador en Vigo, que sigue creciendo a pasos agigantados. Tanto es así que los bomberos tienen una lista de espera con peticiones de vecinos que reclaman la retirada de nidos. Dichas demandas superan el medio centenar y las más antiguas ya fueron planteadas en septiembre. Ayer, precisamente dos días después de fallecer un vecino de O Porriño a causa de al menos 25 picaduras de velutina, el Concello y los responsables del cuerpo de bomberos decidieron poner en marcha un equipo específico para atender las reclamaciones vecinales y actuar frente a otras que puedan surgir.

Los integrantes de la nueva brigada contra la velutina son voluntarios que han decidido sumarse al equipo. Está previsto que trabajen a diario de las 9 de la mañana a las 5 de la tarde, y que atiendan tanto los casos de la zona urbana del municipio como de las parroquias. Aquí también colabora la Policía Local, que recoge las llamadas de ciudadanos alertando de la presencia de nidos y luego trasladan esa información a los bomberos. En este equipo de emergencias reconocían ayer que lo ocurrido en O Porriño obligó a agilizar la capacidad de respuesta a los vigueses afectados por la plaga, ya que la propia actividad del día a día de este departamento municipal no dejaba tiempo para atender a toda la gran cantidad de demandas ciudadanas.

El hecho de que los últimos otoños fuesen más cálidos de lo habitual tampoco ayudó a frenar la colonización del insecto, que con el frío está abocado a morir y dejar sus nidos en desuso. La gran sorpresa, sobre todo en el 2016, fue comprobar que muchas de las avispas reinas lograron sobrevivir al invierno para seguir reproduciéndose. Solo entre enero y junio de este año se retiraron, según datos de la Xunta, en Vigo y su entorno más de 600 nidos, que, además, causan una gran alarma social, sobre todo entre la gente de avanzada edad. En Vigo, en el 2016, se quitaron tres al día y las reinas ya tenían colonizado en el 2015 todo el extrarradio de Vigo. Solo ayer, coincidiendo con el primer día de funcionamiento de la nueva brigada, los bomberos retiraron ocho nidos de velutina en la ciudad, y la previsión para hoy es que esa cifra sea superada.

«La población, pese a la campaña de exterminio, se duplica cada año, es un fenómeno imparable»

A José María Bello todo lo relacionado con la avispa velutina le genera un gran preocupación, no tanto por todo lo vivido en los últimos tres años, cuando empezó su colonización, pero sí por lo que puede estar por venir. Él, residente en O Morrazo, es apicultor de profesión y uno de los delegados de la Asociación Galega de Apicultores (AGA) en el sur de la provincia. Las reflexiones que pone sobre la mesa, más que preocupantes, rozan lo apocalíptico: «La población de avispa velutina, pese a las campañas de exterminio que se vienen realizando desde hace tiempo, se duplica cada año, es un fenómeno imparable». Bello pone un ejemplo que resulta bastante ilustrativo: «De cada avispa reina que sobrevive, al año siguiente, y en un radio no superior a los 500 metros, surgen una media de siete o más nidos nuevos, lo que permite hacerse una idea de su capacidad de expansión. Lo que la gente no sabe es que estos insectos pueden trasladarse largas distancias, ya que atraviesan la ría volando con mucha facilidad y eso hace que sí en Cangas y Moaña tienes la situación controlada, y en Vigo no, los insectos nuevos que llegan de la ciudad regeneren la colonia y se conviertan nuevamente en un problema para los residentes en esta parte de O Morrazo».