Los primeros 5.000 kilos de centolla subastados en Vigo se cotizaron entre 6 y 15 euros

S. A. G. VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vazquez

La abundancia del crustáceo está ligada a la escasez de pulpo, su principal depredador

15 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Satisfacción. Es la palabra que mejor define el arranque de la campaña de la centolla y que más repiten los marineros de la flota que se dedica a la extracción del crustáceo en el entorno de la ría de Vigo. «Hay cantidad y bastante buena calidad y tamaños», afirman en la Cofradía de Pescadores de Vigo. Nada distinto a lo previsto, dada la escasez se está registrando de pulpo, uno de los principales depredadores de este crustáceo. La flota está viendo confirmados sus buenos pronósticos .

En la lonja viguesa se subastaron ayer un total de 5.000 kilos de centolla, que alcanzó una cotización máxima de 15 euros y mínima de 6. Un poco más altos fueron los precios en la rula de Cangas, donde se pusieron a la venta 855 kilos. «La primera parada se pagó a 18 euros», afirma el secretario de la cofradía canguesa, David Fernánez. Las paradas son las que hacen los compradores en las pujas a la baja cuando el producto alcanza el precio que están dispuestos a pagar. En la parte baja de la tabla, los últimos ejemplares se vendieron a 6,70 euros.

El escenario es el antítesis del vivido el pasado año -«fue muy pobre», recuerda el gerente cangués-, cuando los marineros hablaban de fiasco, ya que la mayoría de los barcos no pudieron completar el cupo de 35 kilos por persona que fija la normativa, algo que no está suponiendo ningún problema en esta ocasión, ya que están capturando sin problemas dicho cupo. «E máis que houbera», afirma un pescador, que añade que además el producto está muy bien de tamaño.

Al margen de los marineros, los principales beneficiados con tanta abundancia de centollo son los consumidores, ya que la elevada oferta tirará de los precios a la baja. De momento no lo ha hecho en consonancia con la abultada oferta, tal vez porque los comercializadores estaban deseando servir producto a sus clientes después de meses de veda. De hecho, la diferencia de precios respecto del pasado año es prácticamente testimonial, cuando la cotización en las lonjas de Vigo y Cangas no superó los 21 euros.

En el mercado

Los ejemplares más grandes podían adquirirse ayer en los mercados de abastos a 23 euros, aunque los bolsillos con menor poder adquisitivo también encontraban piezas por 11 euros el kilo. «Moita xente podera poñer centolos na mesa de Navidad se a cousa segue así», vaticina un pescador de la cofradía de Vigo.