«La mayoría de los vigueses no han visitado nunca el puerto»

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

MANUEL SOTELO

Más de 3.000 personas han participado en las actividades de Vigo Pesqueiro

14 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La pesca extractiva genera en Vigo un negocio de 1.000 millones de euros al año y proporciona trabajo directo a 9.000 personas, magnitudes que se multiplican por cuatro si se añaden el negocio y el empleo indirecto, y por dos dígitos si se suma la actividad de astilleros, industria auxiliar y centros tecnológicos vinculados al mar, entre otros. Por eso no se entiende el escaso empeño, cuando no nulo, que se ha puesto en promocionar semejante riqueza. «Hay una necesidad imperiosa de que se conozca, de que la ciudad deje de vivir de espaldas al puerto», afirma María Caldeiro, gerente de Fundamar, la primera organización dentro del sector marítimo-pesquero que cuenta con representación paritaria de empresarios y sindicatos, y que hace un año decidió aportar su grano de arena para propiciar esa promoción que echaban en falta y que estaban convencidos de que tendría una alta aceptación. Así nació la marca Vigo Pesqueiro.

-¿La experiencia les ha demostrado que estaban en lo cierto?

-Totalmente. Más de 3.000 personas han participado en las actividades que organizamos. Nos parece todo un éxito, sobre todo si se tiene en cuenta que se trata de un proyecto autosostenible, que no se apoya en financiación pública.

-¿De dónde sale el dinero?

-De nuestro trabajo, de la aportación que hace Fundamar en personal y estructura y de que las actividades no son gratuitas. Los participantes pagan entre 3 y 8 euros.

-¿Cuáles son las más demandadas?

-Las visitas a la lonja de altura y gran altura. Nos las piden constantemente, pero no se pueden hacer las que nos gustaría porque la actividad allí es frenética, trabajan miles de personas y se entorpece el trabajo. Estamos tratando de buscar una solución con el Puerto, quizá construir una pasarela como la que tiene la de bajura que no tenga demasiado coste y desde la que se pueda seguir el movimiento vertiginoso que se genera cada día sin molestar. También tienen mucha demanda los paseos por la ría y las visitas a buques congeladores. Poca gente sabe cómo es un barco por dentro. De hecho, la mayoría de los vigueses no han visitado nunca el puerto, si acaso en alguna jornada gastronómica. Ven la barrera y piensan que no se puede entrar.

-¿Qué respuesta han encontrado en el sector?

-Muy buena. Algunas entidades y empresas se sumaron a la iniciativa desde el principio, otras se han ido incorporado luego. Firmas como López Novoa, Bouzón, Cardama... entendieron la necesidad de mostrar esa riqueza, igual que la Escuela Náutico Pesquera, el Instituto Oceanográfico, el CSIC, el Museo del Mar o la ECIMAT.

-¿Cuál es el perfil del participante en las rutas y visitas?

-Al menos el 50 % son mayores de 55 años y un 60 % son mujeres.

-¿Qué retos se plantean para este segundo año de vida?

-Hemos empezado a llevar Vigo Pesqueiro a las aulas. La programación incluye talleres de marisqueo para niños de infantil y primaria, actividad para la que contamos con la asociación de mariscadores de Vigo, y visitas al puerto y a barcos científicos para alumnos de primaria y secundaria. Ya han pedido información más de 20 colegios. En las próximas semanas pretendemos poner en marcha un programa específico para personas discapacitadas o en riesgo de exclusión.