Lotería, sí; y entradas... ya veremos

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

La tercera generación de la Central de Espectáculos se replantea la continuidad

03 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Carlos Martínez creció entre billetes, como su padre Román. No es que nadaran en la abundancia, sino que su abuelo, el redondelano Jesús Martínez Táboas, fundó en 1942 en Vigo la Central de Espectáculos, marca que tienen registrada. El comerciante encarna a la tercera generación. «Yo jugaba a lanzar tacos de las quinielas a la foto de un jugador del Celta que estaba colgada en la pared», recuerda, en un acceso de nostalgia. Su emprendedor abuelo, hombre viajero, trasladó a su tierra un negocio dedicado a la venta de entradas para todo tipo de eventos que es común en otros países, donde el despacho de localidades es una actividad comercial como otras. O al menos lo era antes, ya que Internet está acabando con la ventanilla en todas partes.

Esa es una de las razones por las que el fin de semana pasado el establecimiento instalado desde el siglo pasado en Velázquez Moreno, 26 (que además es la Administración nº 14 de Loterías y Apuestas del Estado) colgaba un cartel de despedida: «Tras 75 años, varios miles de clientes y varios millones de entradas vendidas, ha llegado el momento de cerrar esta taquilla. Con la satisfacción del trabajo bien hecho, ha sido un placer atenderles. Muchas gracias».

El nieto del fundador, que lleva el negocio con su mujer, Lola, aclara que se suman otras razones a la decisión de bajar el telón de la ventanilla física: «De aquí a diciembre trasladamos la administración de loterías y nos vamos a la calle Eduardo Iglesias, 10. Lo que dejamos es la venta de entradas, pero seguimos con el otro negocio y aún estamos en el mismo local hasta que no tengamos el otro listo», subraya. Los motivos de la mudanza también son varios. Por una parte, se hallan en un edificio de renta antigua en el que habrá reformas dentro de poco. «Antes de que empiecen ya decidimos irnos», asegura. Y por otra parte añade que Loterías se rige por unas normas muy estrictas para sus administraciones. «Impide a sus usufructuarios que no computan como mixtos compaginar dos actividades comerciales diferentes. En ese caso estamos unos pocos en España, pero cada cinco o seis años me piden todo el papeleo y opté por el cambio», explica.

Por si acaso, el nuevo local estará preparado para tener los dos negocios completamente separados y con acceso independiente, pero no las tiene todas consigo. De hecho, cree que lo más seguro es que no vuelva a dedicarse a la venta de entradas porque ya no le compensa. «Quedo a expensas de las operadoras. Dependerá de que Ataquilla y Ticketea acepten la nueva situación que, por otra parte, yo quiero renegociar, porque me pagan muy poco por entrada y a lo mejor me planto. Ataquilla, por ejemplo, me da 70 céntimos por cada entrada que vendo, independientemente de la comisión que ellos añadan para repercutir en el comprador. Antes el movimiento era enorme, pero ahora ya no tanto. El 80 por ciento se va por Internet, que nos come», por eso quiere que la gestión que le ofrecen las operadoras se amplíe a un radio de acción mayor. «Lo curioso es que mucha gente no sabe que si nos compra las entradas a nosotros, les sale más barato», advierte.

Cine, toros y fútbol

A lo largo de su historia la Central de Espectáculos ha visto pasar a varias generaciones de vigueses. «Fue muchas cosas. Al principio fue un estanco. Después llegó lo de las loterías y dejamos el tabaco porque eran incompatibles. Como Central de Espectáculos se empezó con entradas de cine», recuerda su padre, Román, que en broma, asegura que para cambiar de local, este año tienen el Gordo de Navidad. Poco a poco fueron añadiendo más eventos. En la imagen de los años 50 que guarda en el ordenador se puede ver a decenas de jóvenes esperando su turno cuando aún tenía al lado la heladería La Ibense. Durante muchos años, ellos se ocuparon también de vender las entradas del Real Club Celta, no solo en la ventanilla de su local, sino que gestionaban el despacho en el estadio, contratados por el club. Más tarde llegaron los espectáculos a Castrelos y se fue ampliando el catálogo, al que se sumaron , por ejemplo, las localidades para asistir a la feria taurina de Pontevedra.

Administración 14. Sigue hasta fin de año donde estuvo siempre (Velázquez Moreno, 26). Se mudarán a Eduardo Iglesias, 10, cuando esté listo el nuevo local.

Central de Espectáculos. Volverá si le mejoran condiciones que le compensen.