La ama de casa herida en la deflagración de su horno continúa en estado grave

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

03 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La vecina de Coia de 57 años que sufrió quemaduras graves al explotar el horno de gas propano donde cocinaba una comida familiar el pasado domingo continúa en estado grave en el hospital, según indicaron fuentes policiales. Es la única información que ha trascendido porque el Hospital Povisa, donde está ingresada la paciente en la unidad de quemados, no ha revelado datos del parte médico ni del estado clínico de la mujer porque prevalece el derecho a la intimidad de la víctima. La ley de transparencia solo rige para las instituciones públicas. Todo apunta a que la herida tendrá que pasar varios días más ingresada para recibir curas por sus graves quemaduras en el 40 % de su cuerpo.

La Policía Científica inspeccionó el escenario de la deflagración y todo apunta a que se produjo accidentalmente por la rotura de una goma de conducción de gas que generó una fuga en el horno durante la cocción. El calor generado prendió en la bolsa de gas acumulada y la explosión cogió por sorpresa a la cocinera, que sufrió quemaduras en la parte delantera del cuerpo, cuando abrió el horno. Sus dos hijas, que acudía a la comida familiar, lograron abandonar a pie el piso con la madre herida.

El accidente fue al mediodía en un quinto piso en el número 5 de la calle Cangas. El inmueble pertenece al hermano de la perjudicada. Los bomberos y la policía desalojaron el edificio y el colindante del número 3 como medida preventiva y seguridad para el resto de los vecinos. Muchos oyeron un ruido «ensordecedor» en el inmueble.