Delta Vigo apura la obra de la planta de Nigrán ante la saturación del resto

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

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Centrada en el sector aeronáutico, producirá piezas para alas y trenes de aterrizaje

02 oct 2017 . Actualizado a las 23:19 h.

Las obras del edificio corporativo de la nueva planta que Delta Vigo está construyendo en el parque empresarial de Porto do Molle (Nigrán) no finalizarán hasta marzo, pero la empresa, que fabrica componentes tanto para el sector de la automoción como el aeronáutico, no puede esperar tantos meses para arrancar la producción. La saturación de las tres factorías con las que ya cuenta, dos en Vigo y una en Illescas, la obligan a acelerar el proceso. «Desde primeros de septiembre estamos poniendo a punto todos medios productivos y de logística», afirma el presidente del grupo, Francisco Puga, que añade que ya se han firmado 43 contratos de los más del medio centenar previsto.

La superficie es de 13.000 metros cuadrados sobre una parcela de 23.000, lo que la convierte en la mayor planta del grupo. La inversión supera los 30 millones.

Aunque producirán piezas para la industria espacial y del automóvil, el fuerte de la planta será la aeronáutica. «Trabajamos con los principales constructores del sector», afirma Puga. Es el caso de Airbus, Boeing, Bombardier, y Embraer, entre otros, para los que realizan componentes para alas, estabilizadores, trenes de aterrizaje, belley fairing (parte inferior del avión) y fan cowl (recubrimiento del motor del avión).

A juicio del máximo responsable de Delta Vigo el secreto del crecimiento que viene experimentado el grupo en los últimos años y que les garantiza una importante carga de trabajo radica en que «nuestros planteamientos se hacen con visión de futuro porque el mercado global que nos toca vivir es muy competitivo y exigente». Por eso, añade, «desarrollamos actividades muy diferentes para clientes y sectores diversos, lo que nos permite planificar nuestra sostenibilidad a labor plazo con ciertas garantías».

Esa visión de futuro es lo que va a permitirles cumplir con antelación el plan estratégico que habían diseñado hasta el 2020. También en lo que a facturación se refiere. La previsión era alcanzar ese año los 65 millones de facturación, pero al ritmo que van los alcanzarán en el 2019. El crecimiento es sustancial, ya que en el 2016 la cifra de negocio fue de 25 millones. «Después de 70 años de actividad ininterrumpida en Delta todos trabajamos para celebrar el centenario», concluye Puga. La compañía nació en 1947 en una nave en Peinador, donde ahora tienen dos. En el 2003 abrieron la planta de Valladares y en el 2011 la de Illescas.