Primera Instancia 11 de Vigo incorporará una gran pantalla para ver los expedientes
06 ago 2017 . Actualizado a las 00:17 h.El único tribunal de Galicia que está digitalizado y funciona sin papel al 100 % va a dar un paso más en su enganche a Internet. La idea de los responsables del juzgado de primera instancia número 11 de Vigo es que la futura celebración de juicios en su sala de audiencias no requiera del uso de un solo folio. ¿Cómo pueden desaparecer las copias impresas y esos voluminosos tomos y legajos que constituyen la base de la prueba de un juicio y que las partes consultan en los interrogatorios en la vista?
El plan del juzgado es instalar en breve un monitor de grandes dimensiones que muestre en la pantalla los documentos previamente escaneados y guardados en formato PDF. Si un abogado pide que un testigo reconozca su firma en un contrato no será necesario que el ujier le muestre la página grapada en un abultado rollo. Bastará con un solo movimiento de ratón para hacer clic y exhibir en la pantalla la página.
En un juicio, los abogados citan constantemente los números de las páginas del procedimiento para que el demandado o los testigos aclaren contradicciones respecto a lo que declararon tiempo atrás. El auxiliar de la sala podrá localizar fácilmente el párrafo conflictivo y ampliarlo con la lupa en la pantalla.
Es probable que esta nueva tecnología también sea aplicable para las intervenciones a través de videoconferencia. Actualmente, la Audiencia Provincial exhibe la página impresa tras proyectarla en un escáner de forma que una persona situada a cientos de kilómetros la pueda visualizar. La idea de primera instancia número 11 es dar un paso más y evitar el paso manual y hacerlo de forma completamente digitalizada.
Mientras se ultima la instalación de este nuevo aparato, el tribunal gallego pionero en trabajar completamente sin papel también ha logrado enviar comunicaciones por Internet al servicio común de embargos y desahucios, cuya sede está en el Casco Vello, a tres kilómetros de los juzgados de la calle Lalín. Los tribunales y la oficina de notificaciones están comunicadas mediante un servicio de coche eléctrico que, a primera y última hora de la mañana, transporta expedientes en papel entre ambos puntos.
El juzgado pionero en digitalización propuso que la Xunta instalase una aplicación en la oficina común que le permitiese recibir por vía electrónica las notificaciones del juez para ejecutar las órdenes de embargo y de desahucios de inquilinos e hipotecados morosos. Al hacerlo todo a través de cables, se eliminó el papel que había que imprimir para que el chófer de la Xunta lo llevase todos los días desde la calle Lalín al Casco Vello.
El coche eléctrico seguirá funcionando igualmente porque el resto de los juzgados de lo civil no han logrado la plena inmersión en el papel cero y siguen mandando impresas sus órdenes de ejecución de desahucio. Pero el proyecto evaluará las ventajas de la Justicia digitalizada y los costes que se ahorrarían en material de oficina, impresión y en fletar un coche eléctrico.
El juzgado de primera instancia número 11 de Vigo opera sin papel desde el 2016. Otros juzgados gallegos también han implementado este servicio pero todavía imprimen los escritos de los abogados que le llegan a través de la plataforma LexNet. En el tribunal pionero se prescindió de tal paso y los expedientes que antes abultaban 300 páginas de media ahora solo ocupan una carpetilla con un folio, en el que se indica el código de referencia para localizar el documento en el servidor informático.
Otra dificultad era lograr la firma digital, obstáculo vencido porque el juez y la letrada de la Administración de Justicia ya disponen de aparatos electrónicos especiales para rubricar los documentos. Y los funcionarios cuentan con una doble pantalla para cortar y pegar información con un único clic de ratón.
El proyecto de digitalización de la Justicia sufrió un revés la semana pasada al descubrirse fallos de seguridad en el portal LexNet, a través de la que los abogados envían sus demandas al juzgado.
El juez ya envía por Internet sus notificaciones de desahucio a la sede del Casco Vello