No hay hueco para casarse en los juzgados de Vigo hasta octubre

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M. Moralejo

La agenda de la jueza del Registro Civil está completa para todo agosto y septiembre

02 ago 2017 . Actualizado a las 22:08 h.

Ni un hueco en la agenda para celebrar bodas civiles en los juzgados de Vigo. El cartel está completo durante los próximos dos meses. Todo lleno en agosto y septiembre. Si una pareja de novios llegase hoy al Registro Civil con todos los papeles para pedir que les concediesen la fecha libre más próxima para casarse, tendrían que esperar, como mínimo, a octubre, cuando queda alguna hora disponible.

El mes de agosto tiene la peculiaridad de que se trata de la fecha del calendario más demandada por los contrayentes de Vigo, debido al buen tiempo y las vacaciones. A ello se suma el hecho de que el letrado de la Administración de Justicia, que oficia bodas todos los martes, está de descanso, por lo que hay menos personal para oficiar estas uniones. Por tanto, este mes no hay manera de conseguir una plaza para las nupcias.

La única opción viable para los contrayentes que no puedan esperar en agosto a unirse en matrimonio sería acudir a un notario para que este profesional celebre la ceremonia, ya que la ley habilitó esta figura recientemente para ello. Se trata de una alternativa que cuesta dinero mientras que la boda civil en los juzgados es gratis. A la notaría recurren pocas parejas en Vigo pero resulta ser una buena solución cuando las nupcias se celebra en algún bello paraje alejado de la ciudad, por ejemplo, en un pazo de la comarca o en algún restaurante con un entorno envidiable en la periferia. A la vez que se desplaza el notario, también acuden los comensales y luego ya celebran en el mismo sitio el banquete. Se ha dado la situación de que, a veces, el notario es un amigo de los futuros cónyuges y todo queda en casa.

El ritmo de celebración de bodas civiles en los juzgados es de dos días por semana. Los martes corren a cargo del letrado de la Administración de Justicia y los viernes por parte de la jueza, o por una compañera que la sustituye cuando ella está de vacaciones. Los altos funcionarios celebran una media de nueve bodas al día pero, en el caso de agosto, se ha apretado la agenda para hacer más sitio, debido a la alta demanda. En la temporada alta, los juristas no dudan en ampliar los días de bodas a la semana o apretujar más de una decena de enlaces nupciales cada mañana.

Casarse en un cuarto de hora

El Registro Civil tiene cronometrada la duración de cada boda: quince minutos. La ceremonia es bastante aséptica y consiste en que el juez o el secretario lee los artículos constitucionales o legales relacionados con los derechos y obligaciones conyugales. La ley hace especial hincapié en la importancia de la igualdad de género, en el castigo de los malos tratos y el socorro mutuo entre los cónyuges. El procedimiento siempre es el mismo pero el oficiante puede brindar una nota de color o emotiva si percibe que la pareja parece muy enamorada y los invitados viven el momento. Hay que recordar que la mayoría de los contrayentes ya pasaron anteriormente por el altar y estas son sus segundas nupcias.

Al término de la ceremonia, los invitados deben acatar la normativa del decanato y esperar a lanzar la lluvia de arroz cuando los recién casados se van del edificio.

Cada ceremonia dura 15 minutos y el jurista lee capítulos legales que afectan al matrimonio