El Céltiga solo cede ante el Coruxo en la tanda de penaltis en los cuartos de la Copa Federación

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo A ILLA / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Los de Edu Charlín tutearon a su rival de Segunda División B, con ocasiones contadas para ambos bandos de romper el 0-0 final. El Ribadumia también es apeado

31 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El fútbol de O Salnés no tendrá esta temporada campeón de la fase autonómica de la Copa Federación, condición que lució el curso pasado el Arousa. Eliminado este por el Céltiga el pasado miércoles, su verdugo caía ayer a primera hora de la noche con el Coruxo de Segunda B en los cuartos de final solo media hora después de que el Ribadumia sucumbiera en su visita al Alondras. Cierto es, en ese desenlace a cara o cruz que siempre resulta la tanda de penaltis, con el guardameta del Coruxo, Alberto, elevándose a hombre del partido en su prolongación a balón parado sobre el césped del Salvador Otero.

Hasta esa fatídica serie de lanzamientos desde los once metros lo cierto es que el nuevo Céltiga que construye Edu Charlín mostró hechuras de un equipo que, al menos en esta fase de calentamiento, a tres semanas del comienzo de las correspondientes ligas de Tercera y Segunda B, es capaz de tutear a un rival de la categoría de bronce española. Una denominación de origen que el cuadro vigués exhibió no tanto en su ritmo de juego, como en la chispa, el orden y el concierto de su desplazamiento del esférico. Insuficiente en todo caso para dominar a un cuadro insular que parece querer empezar a crecer sobre el control posicional de los espacios.

Un disparo lejano de Eloy atrapado por Alberto abría las hostilidades en el minuto 5, con Quique Cubas enviando en el 11 desde la frontal del área el balón algo desviado tras una hermosa acción concertada con desplazamiento de banda y participación de varios de sus compañeros.

A partir de ahí el juego se consumió en la parcela central del campo. Con tan solo tres acercamientos visitantes con peligro en los siete minutos previos al descanso. Pablo García firmaba un disparo similar al de Quique Cubas en el arranque del choque, sucedido por un remate del cambadés Pibe al larguero en un saque directo de falta desde el borde del área grande; para acabar con Pablo Crespo a un tris de finalizar sin oposión un buen centro colgado a la altura del punto de penalti frente a Manu Táboas.

Pendientes de Paco

El Céltiga perdía a los 5 minutos de la reanudación a su lateral derecho, Paco, por un choque con un rival que amenaza una notable lesión -ayer el club quedaba pendiente de su estado-.

Los locales volvieron a rematar primero a puerta contraria, esta vez en el 58 con un cabezazo bien guiado de Stefan pero sin potencia que pusiese en apuros a Alberto. Después el Coruxo encadenó en seis minutos, del 60 al 66, tres de sus mejores ocasiones de gol, con Fernando, entrado en el 46, de protagonista. Primero no llegando por centímetros a un gran pase desde la banda derecha de Pibe, después con un cabezazo que mandó algo alto el balón en un saque de falta lejana, y por último, con Manu Táboas sacando un pie prodigioso para abortar su potente remate a pase de fondo de Antón en el corazón del área.

En el último cuarto de hora el Céltiga tuvo cómo eludir la tanda de penaltis. Con Xian empapando de veneno el cuero enviado desde tres cuartos de campo a Eloy, al que solo la excelente salida al paso de Alberto privó de mayores opciones de éxito a su disparo en el área entre los tres palos. En el siguiente y casi inmediato ataque isleño el propio Eloy se fabricó una ocasión de gol, elevando el balón entre dos defensores para superarlos prolongando el desplazamiento con un toque de cabeza, pero su tiro salía cruzado. Manu Táboas evitó en el 86 el 0-1 mandando a córner un misil de Escobar. Y el Céltiga tendría una doble ocasión en el 87, con Alberto mandando a córner otro remate de Eloy, y Ángelo cabeceando algo cruzado de más.

El entrenador local, Edu Charlín, se mostró contento con la respuesta de sus hombres: «O equipo volveu competir dunha maneira fabulosa dende o compromiso e un posicionamento correcto, boa orde defensiva e fases de boas tomas de decisións».

FICHA:

CÉLTIGA: Manu Táboas, Paco (Nico, min 53), Xian, Ángelo, Emilio, Javi (Carlos Besada, min 81), Reigosa (Álex Pena, min 68), Stefan, Manu, Tato (Adrián Camiño, min 77) y Eloy

CORUXO: Alberto, Rafa Mella, Pablo García, Mario, Pablo Crespo, Nacho (Borja Yebra, min 64), Quique Cubas (Escobar, min 82), Antón, Pibe, Pitu (Fernando, min 46) y Juampa

Tanda de penaltis tras el 0-0 al término del tiempo reglamentario: 0-1: Antón. 0-1: Alberto para, por dos veces, el lanzamiento de Stefan. 0-2: Mario. 0-2: Alberto detiene el disparo de Xian. 0-3: Borja Yebra. 1-3: Manu. 1-4: Pibe.

Árbitro: Alberto Gómez, del Colegio de Pontevedra, auxiliado en las bandas por Juncal Moreira y Raposo Barcia. Amonestó a los jugadores locales Paco, Emilio y Javi, y a los visitantes Fernando y Juampa.

El Ribadumia también cae

El Alondras se clasificó ayer para semifinales de la Copa Federación tras derrotar por 2-0 al Ribadumia en el Campo de O Morrazo. Pero hubo que esperar a los minutos finales para que la balanza se decantara del lado de los de Antonio Fernández, que afronta su primera temporada al frente del equipo.

El encargado de abrir la lata fue un futbolista que partió en el banquillo, Agujetas, que anotó el 1-0 en el minuto 86, justo cuando el duelo parecía abocado a los penaltis. Poco después, en el 89, Mauro sentenciaba la eliminatoria desde los once metros.

FICHA:

ALONDRAS: Álex Vila, Gabriel (Santos, min 89), Varo, Aram, Aitor Díaz, Abel, Iván Pérez, Raúl (Agujetas, min 63), Mintegui (Palmás, min 46), Mauro y Álex Rey (Pardavila, min 53)

RIBADUMIA: Iván Parada, Santi, Manu Bugallo (David Gómez, min 71), Miguel Vázquez, Iván Renda, Gabi, Fran Fandiño, Alberto (Ramón, min 46), Hugo Soto (Pablo Mota, min 81), José Filgueira y Rubén Cerqueiras

Goles: 1-0, min 86: Agujetas. 2-0, min 89: Mauro, de penalti.

Árbitro: Asier Manuel Fariña. Amonestó al jugador local Mauro, y a los visitantes Hugo Soto, Santi, Iván Renda y Miguel Vázquez.