28 jul 2017 . Actualizado a las 19:22 h.

Dos meses después de una decepción, llega una gran noticia. Barreras ha firmado el contrato por un minicrucero de lujo que se convertirá en el buque civil más caro construido nunca en España. El revés lo puso en mayo Pemex, la petrolera mexicana que, si bien se mantiene en el accionariado del astillero, renuncia a encargar nuevos buques. Con los precios del crudo por los suelos, no está el mercado petrolero para grandes inversiones. Cuando pensábamos que aquí comenzaba la crónica de una muerte anunciada, resulta que las gradas de Beiramar tienen mucha historia por delante.

El acuerdo con la compañía estadounidense Ritz-Carlton suena en todo espectacular. El buque será un híbrido entre un megayate y un crucero de lujo. Con sus 190 metros de eslora, contará con 149 suites y capacidad para 298 pasajeros. Pero lo más importante es que su presupuesto de construcción será de 240 millones de euros. Y que se augura empleo para 600 personas, con picos de hasta 800, durante 30 meses.

Sin duda, hay que felicitar a los gestores de Barreras por este éxito. Y es de justicia que el presidente Feijoo se haya sumado a la foto. Porque aquí se presentaba un contrato firmado. Y sin ninguna cita electoral inminente. Algo muy distinto a lo que sucedió en aquel acto surrealista de corte de chapa en el 2014 con los floteles de Pemex. En esta ocasión, la imagen es correcta y merece una enhorabuena.

Barreras, el mayor astillero privado de España y una institución en la historia de nuestra industria, acaba de darnos una gran alegría. Sin duda estas son las noticias que los ciudadanos de Vigo queremos festejar.