01 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

EEn el penúltimo disco de The Soul Jacket, una banda de Vigo de auténtico lujo, hay un tema titulado The Boxer. Sigue la tradición de la música inspirada en el boxeo, que tiene su cumbre en Hurricane, de Bob Dylan, sobre la injusticia racial que llevó a Rubin Huracán Carter a la cárcel por un delito que no había cometido. También podemos citar el The Boxer de Simon & Garfunkel; o Boxers, de Morrissey, cuyo vídeo es un homenaje al glorioso comienzo de Toro Salvaje, una obra maestra de Martin Scorsese y de Robert De Niro, con Cavalleria Rusticana como banda sonora.

Así que suele haber mucha épica en la música compuesta sobre boxeo. Y en el tema The Soul Jacket también la hay. Porque la canción está dedicada a Pedro Ferradás, boxeador vigués varias veces campeón de España y del Mundo Hispano. Aspiró al título mundial, que se le escapó una noche triste en Cardiff ante Steve Robinson. Pero, sobre todo, no olvidaremos sus duelos por el cinturón europeo frente al ruso Alexandrov. El último tuvo a miles de vigueses pegados al televisor de madrugada. Y Ferradás soportó un castigo descomunal, movido por una voluntad de acero. Fue muy duro ver aquello.

Pero la épica no estaba ahí. Estaba en la gasolinera de la plaza de España. Porque, a los pocos días, con los ojos morados, con puntos de sutura y con la cara inflada, Ferradás estaba sirviendo gasolina. Era su trabajo. Había peleado en vacaciones. Y se reincorporó a su puesto tras la derrota. Para muchos vigueses aquel tipo fue un héroe. Un trabajador. Un ejemplo para tanto futbolista mimado. Y a esa épica canta The Soul Jacket en The Boxer.