Célibe en Senegal, casado en Vigo

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

A juicio un ilegal por contraer nupcias con un nombre ficticio

03 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Un senegalés fue citado ayer para un juicio en Vigo acusado de falsificar su documentación para casarse en esta ciudad. Según la Fiscalía, se hizo pasar por otro compatriota para contraer matrimonio ya que él no podía revelar su verdadera identidad porque tenía antecedentes penales y tenía vigente una orden de expulsión de España. Entre los documentos que presentó para casarse estaba un certificado de celibato expedido en su tierra natal.

Los hechos se remontan al 2014 cuando el senegalés G.S., que carecía de permiso de residencia en España y tenía orden de expulsión por diez años, acudió al Registro de Parejas de Hecho de la provincia de Pontevedra y presentó, supuestamente, una documentación de identidad que era falsa e inducía a error.

Luego fue al registro civil de Vigo y presentó un pasaporte auténtico expedido por las autoridades senegalesas en España, en el cual el implicado o un amigo, había insertado unos datos en la biografía del documento con una filiación distinta a la suya propia.

Puso una identidad ficticia y una fecha de nacimiento distinta a la suya para dar apariencia de veracidad. Su plan era inducir a error al funcionario que debía elaborar el documento en Senegal y a las autoridades ante las que se iba a identificar.

Una vez en Pontevedra, según la Fiscalía, el individuo exhibió el pasaporte falso y se registró como pareja de hecho. En Vigo acudió a contraer matrimonio civil y aportó un certificado de nacimiento y otro de celibato expedidos en Senegal que eran falsos porque había puesto una identidad y fecha de nacimiento ficticios. La Fiscalía da a entender que su pretensión de casarse no pudo llevarse a cabo al ser descubierta la patraña.

Los funcionarios de Vigo, además, estaban haciendo un especial seguimiento a las parejas formadas por viguesas y extranjeros para detectar posibles casos de bodas por conveniencia para obtener la nacionalidad o el permiso de residencia, sobre todo cuando saltaban todas las sospechas durante las entrevistas a los novios.

Su plan era usar todos estos datos falsos para evitar tener que cumplir su orden de expulsión del territorio nacional y ocultar la existencia de detenciones anteriores.

La Fiscalía lo ha acusado de un delito continuado de falsedad en documento oficial e, inicialmente, solicitó que le impusiesen una pena de dos años de cárcel y una multa de 2.400 euros.

Propuesta de expulsión

Posteriormente, la Fiscalía buscó una fórmula más favorable para el acusado y propuso que en la sentencia se sustituyese la pena de prisión por la expulsión de territorio nacional y la prohibición en España durante cinco años.

Otra idea del Ministerio Público fue que, en caso de ser condenado, el implicado fuese ingresado en un centro de internamiento de extranjeros mientras se efectuasen los trámites de la expulsión. La Fiscalía pidió que, si el juzgado lo acuerda, el abandono del país sea lo más rápido posible, en un plazo de 60 días.