La vuelta al mundo en coche a los 79 años

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vazquez

Llega a Vigo una alemana que ha recorrido los cinco continentes con su vehículo clásico desde el 2014

03 feb 2017 . Actualizado a las 11:30 h.

Con 78.000 kilómetros y 45 países de los cinco continentes a sus espaldas, Heidi Hetzer ha llegado a Vigo. Es el primer puerto europeo que esta mujer de 79 años pisa en su regreso a Alemania después de dar la vuelta al mundo en un coche clásico. Emula a Cläerenore Stinnes, la primera persona que lo hizo en 1927. Aquella mujer pionera que rompió moldes le sirve de inspiración y por eso eligió para su aventura un vehículo semejante al Adler Car utilizado en aquella primera travesía. El suyo es un Hudson Great de 1930, un vehículo que no deja indiferente a nadie y que le ha ocasionado no pocos problemas durante la travesía, que ella misma ha ido solventando en la mayor parte de las ocasiones.

Llegó a Vigo desde Sudáfrica a bordo de un carguero y, nada más desembarcar, se dirigió al concesionario de Opel de la avenida de Madrid, donde le cambiaron las llantas, que estaban muy desgastadas, y le realizaron otras tareas de mantenimiento.

Heidi siempre ha estado muy vinculada a esta marca. Su padre fundó un concesionario en Berlín en 1919. Cuando falleció, ella heredó el negocio y hasta hace poco tiempo estuvo al frente del mayor establecimiento de venta de coches Opel de la ciudad alemana, con 150 empleados a su cargo. Sus hijos no siguieron con la tradición familiar y, al cumplir 75 años, decidió vender el concesionario con la alegría de que no se perdieron ninguno de los puestos de trabajo. Fue a partir de ese momento cuando empezó a fraguarse el sueño de dar la vuelta al mundo en coche. No quería resignarse a llevar una vida sedentaria una vez alcanzada la jubilación. En junio de 2014 arrancó el coche para emprender el viaje más apasionante de su vida. De Berlín se dirigió a Estambul y de allí a Irán y Azerbayán. China, Malasia, Tailandia y Singapur fueron algunos de los países que visitó antes de dar el salto a Australia y, de allí a Nueva Zelanda, donde hizo más de 7.000 kilómetros. Por increíble que parezca, con su coche recorrió toda América, de norte a sur y de este a oeste. Tras cruzar el canal de Panamá, se le abrieron las puertas de Sudamérica. En Bolivia sufrió el mal de altura a 4.000 metros sobre el nivel del mar. Tras recorrer Chile, Perú (donde tuvo un problema de salud) y la Patagonia, llegó a Buenos Aires, desde donde se embarcó a África, continente donde recorrió 9.000 kilómetros con su vehículo.

«Lo mejor, la gente»

Heidi reconoce que después de todos los países y de las miles de personas que ha conocido durante estos tres años nunca ha tenido miedo. «De todos los sitios que he conocido, lo mejor es la gente», destaca. Más de la mitad de las veces se ha hospedado en casas de las personas que ha ido conociendo a lo largo del camino. «La gente es muy agradable, solidaria, amigable y generosa», afirma. Su norma es no reservar nunca habitación en ningún hotel hotel. Podría permitirse alojarse en lugares lujosos, pero opta siempre por lugares económicos, que no le cuesten más de 50 euros la noche y, si no lo encuentra, se recuesta en el asiento de su coche a pasar la noche. Allí tiene fotografías de sus hijos y nietos y observarlas le reconforta en el viaje. Viaja siempre acompañada con un Ipad, que le sirve para hacer fotografías e ir narrando todas sus aventuras en un blog que ya cuenta con más de 3,7 millones de visitas. De todos los lugares que ha visitado, afirma que Nueva Zelanda es el país más apasionante y que Buenos Aires es la ciudad más bonita.

Mañana partirá de Vigo en dirección a Lisboa. Esperará a un equipo de reporteros de un canal alemán que la van a grabar en ruta durante cinco días. En España está a punto de culminar un sueño. Cuenta con visitar Madrid, Marbella, Barcelona y, de allí cruzar a Francia para pasar por Marsella, París y Bélgica, antes de regresar a su casa de Berlín el 12 de marzo. Puede que no sea su último viaje. Asegura que si hay un próximo, será con un vehículo de mayores prestaciones y tracción a las cuatro ruedas para poder visitar más lugares.

78.000 kilómetros y 45 países. Más de la mitad de las veces se ha hospedado en casas personas que le invitan.

Un vehículo de 87 años. Heidi está a punto de cumplir su sueño a bordo de un Hudson Great, un vehículo americano construido en 1930.