El goteo de bajas reduce a la mitad los socios de la CEP en seis años

Soledad Antón García
soledad antón VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

xoán c. gil

Los últimos en abandonar la patronal han sido AJE, Aetravi y Acopevi por las cuotas

13 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La Confederación de Empresarios de Pontevedra no para de perder músculo. Los años más duros de la crisis diezmaron la nómina de socios, que en los últimos seis años ha quedado reducida a la mitad, ya que de los más de 130 que tenía en el 2009, ahora no alcanza los 70. La última en abandonar el barco el pasado primero de diciembre ha sido Aetravi, la asociación que agrupa a los comerciantes de As Travesas, que se así suma al goteo de bajas. Este año también han abandonado la organización la Asociación de Jóvenes Empresarios de Vigo (AJE) y la Asociación de Comercializadores de Pescado (Acopevi), y han anunciado que tienen previsto hacerlo de forma inminente el gremio de tintorerías y el de fotógrafos. En cuanto a las denominadas organizaciones territoriales (fuera de Vigo), algunas de las últimas en solicitar la baja han sido las de A Estrada, A Guarda y Redondela.

Las explicaciones que dan en todos los casos son muy similares: las cuotas son demasiado elevadas para las contrapartidas que obtienen. «Somos una organización pequeña que maneja un presupuesto muy ajustado y tenemos que fijar prioridades», afirma un portavoz de Aetravi, que añade que la intención de la CEP es aumentar sustancialmente las cuotas en el 2017. «Hemos acordado irnos antes de que llegue esa subida», dice el mismo portavoz.

En parecidos términos se expresa el presidente de AJE Vigo, Alejandro Cabo: «Ya estamos representados en la CEG y entendíamos que estar también en la Confederación Provincial era una redundancia que requería un desembolso económico que no veíamos rentabilizado. La decisión fue meramente económica».

La decisión de los empresarios de A Estrada tuvo una doble vertiente, según explica su presidente, Gonzalo Figueiras. «El dinero fue una parte porque, en efecto, no recibíamos contrapartida, pero sobre todo creemos que las organizaciones empresariales están para dar servicios y no para practicar guerra de guerrillas». Se refiere a las denuncias de pucherazo formuladas por ocho asociaciones en las elecciones que auparon a Jorge Cebreiros a la presidencia, asunto que aún colea en los tribunales. «Nos fuimos en el momento oportuno». Figueiras critica la multiplicación de estructuras empresariales que lo único que hacen «es originar unos gastos fuera de lo normal. No tiene sentido. Nosotros somos autosuficientes», sentencia.

Lo curioso es que el último abandono deja a la CEP sin contador, cargo que hasta ahora ocupaba un empresario de Aetravi, Manuel Vázquez. Dado que para formar parte de la directiva de la patronal provincial hay que ser miembro de alguna de las asociaciones que la conforman, y la de As Travesas ya no está, Vázquez ha dejado el puesto libre.

Claro que esta situación no es nueva en el equipo que preside Jorge Cebreiros, ya que la vicepresidencia de industria sigue sin titular desde febrero del 2015, y la territorial desde mayo de este año.

El presidente de la CEP, Jorge Cebreiros, que confirma las bajas, señala que uno de los objetivos que se marcó cuando accedió al cargo fue fijar un nuevo modelo de reparto de cuotas entre los asociados, «pero está siendo una tarea fácil», reconoce.