El Sireno de Francisco Leiro cumple 25 años

La Voz

VIGO CIUDAD

. gustavo rivas

La instalación de la escultura en la Porta do Sol causó polémica en la sociedad viguesa

05 nov 2016 . Actualizado a las 13:06 h.

A las 21.20 horas del martes 5 de noviembre de 1991, una grúa gigante sacaba de un camión procedente de Madrid el hombre-pez de Francisco Leiro para colocarlo en la Porta do Sol.

En aquel momento se decía que el Sireno, como fue bautizado popularmente, era el monumento de acero inoxidable más grande del mundo. Con siete metros de largo, tres y medio de ancho y dos de alto, la pieza tuvo que ser fundida en 72 trozos porque no había ningún horno en España capaz de meterla entera.

La colocación de la obra tuvo en San Luis un testigo de excepción. El pintor permaneció en la plaza durante todo el proceso. La escultura de Leiro provocó una gran polémica en Vigo entre sus defensores y sus críticos. El Sireno formaba parte de un plan municipal de colocación de esculturas que incluía los Rederos, de Conde, y los Caballos, de Oliveira.