La conexión entre autocar y avión no despega

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

El único Vitrasa que sube a la terminal de vuelos pasa a un kilómetro de la estación de autobuses

10 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La estación de autobuses de Vigo, encajada en la avenida de Madrid y alejada del centro, sigue sin tener una conexión directa al aeropuerto de Peinador pese a los proyectos de la Xunta y Concello para unirlos con un bus ahora que está creciendo el tráfico de pasajeros de vuelos low-cost.

El único rastro de tal conexión intermodal está en el vestíbulo de la estación de autocares. Un panel digital informa de los horarios de Aena para la salida de aviones desde Vigo a destinos como Lisboa, Madrid, Bolonia o Barcelona. La Voz hizo dos chequeos la semana pasada. El jueves 6, el panel informativo de los vuelos desde Peinador funcionaba pero ayer estaba averiado.

El problema es que ese panel no aclara cómo subir de A Doblada a Peinador. Un pasajero pregunta en la oficina de información de la estación qué línea de bus de Vitrasa le transporta hasta el aeropuerto de Peinador y en qué andén puede tomarla. La sorpresa es mayúscula: «Tiene que salir fuera, subir toda la calle hasta O Calvario y luego torcer a la derecha, hasta la parada de la línea 9A en la calle Jenaro de la Fuente», contesta un empleado. Dicha parada intermodal está a un kilómetro de distancia de la estación de autobuses. En el chequeo realizado ayer, un peatón empleó, a paso normal, 10 minutos y medio en recorrerla.

Otra solución para subir a Peinador es esperar hasta 20 minutos en los andenes de A Doblada y tomar las líneas C2, 4C o 23 de Vitrasa, que paran cerca o en la misma calle Jenaro de la Fuente. Luego, el viajero debe cruzar la calzada para situarse en el sentido correcto de la parada del 9A, que pasa cada media hora.

A muchos viajeros les sorprende esta falta de conexión de bus y avión. «En Bilbao, la estación de buses y el aeropuerto están conectados», dice una pasajera.

La solución más práctica está en la parada de taxis a las puertas de la estación de autobuses. La francesa Anne tuvo que subir varias veces al aeropuerto desde la estación de autobuses y «he pagado un taxi porque no me quedaba otra. Es muy caro». Una carrera cuesta entorno a 20 euros.

Lo paradójico es que de la estación de A Doblada parten a diario autocares a Oporto que paran en el aeropuerto de Sá Carneiro.

Más afectados en comarcas

Pero los mayores afectados son los viajeros del área metropolitana. Guillermo Pereira y Sara Vázquez esperan por el autocar de Ponteareas sentados en las escaleras de los andenes de A Doblada. Reclaman un bus al aeropuerto: «Estaría bien, hay bastante gente de comarcas que le gustaría ir en bus y no puede. Para llegar a Peinador debemos pedir a un familiar que nos acerque». Sara añade: «Y hace falta poner bancos de sentar en el andén».

Otra queja se refiere al deficiente enlace entre las estaciones de autobuses y de ferrocarril de Urzaiz. Están conectadas por la línea 4C solo cada media hora y pocos lo saben. El C2 enlaza con la otra terminal de tren en Guixar, también cada 30 minutos.

Una frecuencia que es insuficiente para los viajeros de las comarcas que llegan a Vigo en un autocar de línea y se apean con prisa porque deben seguir viaje a otro destino. Es el caso de la universitaria Saray, que viaja en bus desde Baiona a A Coruña, donde estudia. Hace la escala en Vigo pero el fallo es que ahí no puede cambiar de medio de transporte. «Ir de Baiona a A Coruña es un rollo. No paro de coger buses de aquí para allá. Necesitaría uno que fuese directo de la estación de autobuses de Vigo a la de tren de Urzaiz porque ahora no hay o son pocas frecuencias. Para ir a A Coruña, cojo obligatoriamente en Vigo otro bus aunque el viaje dure 2 horas y media, más que en tren», lamenta. Tomar el ferrocarril en Guixar no le vale porque «sus trenes son lentos y para eso ya me voy en el bus», explica.

En otras ciudades ve fácil hacer el cambio porque las estaciones de bus y tren están «una al lado de la otra» pero las de Vigo distan 2 kilómetros, a la espera del proyecto de Thom Mayne. «Para mí sería ideal que el bus de Baiona entrase en Vigo y parase en la estación de Urzaiz para coger el tren y ahorrar tiempo», dice.