El partido tratará mañana la convocatoria del próximo congreso local
09 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La junta local del PP abordará mañana su renovación con vistas a preparar la carrera hacia las elecciones municipales del 2019. La directiva tiene tres años por delante para seleccionar a un candidato y potenciar su imagen, alguien que tenga posibilidades de hacer frente a Abel Caballero.
En la parrilla de salida hay tres posibles aspirantes, dos mujeres y un hombre. En primer lugar, lo que se juega es la presidencia del partido en Vigo, cargo que abandonará en breve el concejal José Manuel Figueroa. Además, se tiene que definir el liderazgo para disputar la alcaldía a Caballero y que, por tanto, mejore sustancialmente los resultados de los anteriores comicios locales, donde los populares se hundieron al quedar con solo 7 concejales.
Elena Muñoz parte como favorita para repetir como candidata. La exconselleira aceptó la propuesta de Alberto Núñez Feijoo de encabezar la lista municipal en el 2015 solo unos meses antes de las votaciones que ganó Caballero por mayoría absoluta. Muñoz sigue como portavoz del grupo municipal en el Concello de Vigo y podría ser designada por Feijoo nuevamente. Su hándicap es que, año y medio después, sigue poco conocida en la ciudad. Solo la mitad de los encuestados en recientes sondeos la identifica. Y eso que en los últimos meses ha endurecido su tono en los plenos y en el resto de comparecencias públicas para hacerse oír más.
El segundo candidato en liza a presidir el PP local es el exconselleiro de Economía y empresario Javier Guerra. Si da el paso, su papel sería únicamente orgánico, como ya ha adelantado él mismo, para mejorar la maquinaria interna. No contemplaría entrar en la carrera a las municipales. Sin embargo, no está todo dicho ni cerrado en la dirección del partido, que podría cambiar de opinión en función de las encuestas.
Lucía Molares, exdelegada de la Xunta en Vigo y directora general del Sepes, próxima a la exministra Ana Pastor, es otra posible aspirante. Su carácter amable la acerca a un sector de la militancia. Cuenta con la baza de tener contactos en Madrid.
Figueroa ha ostentado la presidencia del PP local y fue vicepresidente de la Diputación con Louzán. Sobre él aún pesa una investigación en la Operación Patos, pero ha sido exculpado de la Hormigón. Es el concejal más veterano de Vigo y conoce al dedillo los entresijos de la política local.