El Concello manda a Tráfico las multas en el hospital que dijo que no pondría

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

La jefatura provincial podrá sancionar a centenares de conductores que fueron denunciados por el Sergas

29 sep 2016 . Actualizado a las 07:52 h.

La Jefatura Provincial de Tráfico está estudiando las denuncias que el Hospital Álvaro Cunqueiro interpone contra los conductores que estacionan mal sus vehículos. El Sergas ha llevado varios cientos de casos al registro municipal y el Concello siempre ha repetido que no se multaría a los conductores. Sin embargo, al Ayuntamiento no le ha quedado más remedio que remitir a Tráfico las denuncias para que ponga las multas si hay infracción.

Así se desprende del decreto de la fiscalía de área de Vigo por el que se archiva la investigación penal contra el Concello por negarse a regular el tráfico, poner vigilancia y mandar la grúa al nuevo hospital de Vigo. El oficio, al que ha tenido acceso La Voz de Galicia, establece que «no existe ninguna duda» sobre que la competencia de regular el tráfico sea del Concello.

Para su investigación, la fiscala jefa de Vigo, Susana García-Baquero, recabó un informe del jefe de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Vigo. En él, el técnico municipal avisaba que la Jefatura Provincial de Tráfico tiene competencias para multar en el Álvaro Cunqueiro y que, «por lo tanto deben remitirse para su tramitación las denuncias interpuestas por los diferentes agentes de la Policía Local».

En un primer momento, cuando el Sergas empezó a poner denuncias voluntarias contra los conductores que estacionaban mal, el alcalde aseguró que la policía no multaría e incluso afirmó que no se tramitarían las denuncias del Sergas para que hubiese sanción. De hecho, el Servizo Galego de Saúde se dirigió a la fiscalía después de constatar que la policía no solo no atendía sus llamadas sino que, además, no tramitaba las denuncias voluntarias que ponían los vigilantes de seguridad contra los coches mal aparcados.

Sin embargo, el Concello, a la vista de los informes de sus propios técnicos, no tenía otra opción que tramitar las multas. El primer escrito del Sergas a la fiscalía contenía las 231 denuncias que se pusieron a los coches mal aparcados desde septiembre del año pasado hasta marzo de este -en su día el Sergas habló de medio millar-. Más adelante, aportó más denuncias. Se trataba siempre de coches que estacionaban en lugares incorrectos y que entorpecían el tráfico.

La Jefatura Provincial de Tráfico trasladó a la fiscala jefa de Vigo que las denuncias que el Sergas llevó ante la Policía Local «no fueron paralizadas sino que por el contrario se remitieron a la citada jefatura para su tramitación». Por lo tanto, a pesar de que Abel Caballero las daba por paralizadas, es probable que muchas acaben en multa. Es más, gracias a que sí tramita las multas, entre otros motivos, Susana García-Baquero exime al Ayuntamiento de un delito penal de prevaricación

Durante ese mismo tiempo, la grúa retiró quince vehículos del entorno del hospital. También hizo alguna vigilancia. Pero todo cambió con la presentación del escrito ante la fiscalía por parte del Sergas. Un dato lo revela: entre septiembre y enero del año pasado, el hospital llamó a la policía 104 veces; en cien de ellas los agentes dijeron que no tenían competencias para actuar. Ese era el argumento del gobierno local, que el hospital está en un terreno privado.

En los primeros cuatro meses el Sergas llamó a la policía 104 veces

y cien acudió

Un informe de un técnico municipal obligó al gobierno local a mandar las multas a Tráfico

El Sergas renuncia a acciones jurídicas porque la policía ya está actuando

La decisión de la fiscala jefa del área de Vigo ha sido salomónica: el Concello no comete ningún delito pero es responsable de regular el tráfico en los viales del Álvaro Cunqueiro. Al Servizo Galego de Saúde le vale y no piensa recurrir esa decisión. Según explica un portavoz, en las últimas semanas la policía está empezando a actuar. «Queremos que se garantice la seguridad para los usuarios del hospital», dice un portavoz. El problema que se generaba con los coches mal aparcados es que los autobuses de Vitrasa no conseguían maniobrar y que las ambulancias no podían avanzar. Y eso, en el entorno de un hospital, tiene sus peligros. El Sergas asegura que nunca quiso una condena, sino arreglar la situación.

En cuanto al Concello de Vigo, que en este caso era el denunciado, está claro que la fiscalía le exime de responsabilidad penal, aunque señala que su competencia es regular el tráfico del hospital. Abel Caballero no quiso entrar en estos matices ayer y, preguntado al respecto, señaló: «La fiscalía ha archivado el tema y hay que pedir responsabilidades políticas a quien puso la denuncia». Fue la gerencia del hospital quien promovió esa denuncia ante la «pasividad y omisión» de los deberes de actuación.