El fiscal dice que el tráfico del hospital compete al Concello, pero no ve delito

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Archiva la investigación por prevaricación, aunque advierte de que «no existe duda alguna» sobre el hecho de que toca al Ayuntamiento regular el caos del Cunqueiro

28 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La fiscalía de área de Vigo ha decidido archivar la investigación penal que tenía abierta contra el Concello porque este no regula el tráfico en el Hospital Álvaro Cunqueiro. «No puede predicarse relevancia penal de la conducta descrita», dice la fiscala jefa de Vigo, Susana García-Baquero, en el oficio, al que ha tenido acceso La Voz de Galicia. El Ministerio Público investigaba si había prevaricación penal.

No hay delito. Pero la fiscalía sí cree que regular el tráfico es una competencia municipal. «No existe duda en relación a la competencia municipal para la disciplina del tráfico en los citados viales», dice la fiscala en relación a las carreteras interiores de la parcela del Álvaro Cunqueiro. Llega a calificar de «excepcional» que el Concello no envíe ni a sus policías ni a la grúa municipal dentro del hospital «bajo el pretexto de no ser de titularidad municipal». Incluso tira de ironía al contraponer esa actitud con el hecho de que «de forma continuada y, dicho sea de paso, ejemplar, [la competencia de regular el tráfico] se ha ejercido sobre otros viales ajenos a dicha titularidad».

La controversia surge con la propia apertura del hospital, hace ya un año. El párking era de pago y los pacientes y familiares empezaron a aparcar en cualquier esquina. Llegó un momento en que la situación se desmadró, porque algunos autobuses de Vitrasa se veían bloqueados e incluso alguna ambulancia tuvo problemas para avanzar. El Sergas pidió al Concello ayuda y el alcalde se negó a enviar a la policía o a la grúa. El Sergas reaccionó denunciando a las personas que aparcasen mal y Caballero anunció públicamente que no tramitaría las multas. Incluso animaba a los ciudadanos a estacionar donde quisieran.

«De todo ello se infiere que no se trataba de una omisión o pasividad de determinados funcionarios de la Policía Local, sino de una actuación de la concejalía de Seguridad», concluye la fiscala. Su investigación nace a raíz de que el Sergas pusiese los hechos en conocimiento del fiscal de Seguridad Vial y este, al apreciar posible prevaricación, lo remitiese a la fiscalía de área. Por eso, la representante del Ministerio Público pide informes al Concello.

También recoge uno del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico de Pontevedra que es clarificador, ya que sostiene que «todos los viales que circundan y dan acceso a dicho centro hospitalario son gestionados por las autoridades locales de Vigo». Y cita una ley que especifica que «dicha competencia abarca no solo a las vías públicas sino a aquellas que siendo privadas sean utilizadas por una colectividad indeterminada de usuarios sin restricción de entrada».

Incluso hay un informe del jefe de Seguridad y Movilidad del Concello que reconoce que la Jefatura Provincial de Tráfico puede requerir expresamente al Ayuntamiento que intervenga.

Pero todo lo anterior no significa que el Concello cometa un delito penal. Jurídicamente, no es lo mismo una acción que una omisión, como es este caso. Según la fiscala, «no puede afirmarse que la omisión denunciada sea de tal relevancia o gravedad que equivalga a una acción causante del riesgo de quiebra del funcionamiento de las instituciones públicas». Aunque advierte que si el Ayuntamiento no atiende los requerimientos de Tráfico sí podría caer en «responsabilidades penales o administrativas».

Una resolución firmada hace dos semanas que no se notificó hasta después del 25S

Tanto el Sergas como el Ayuntamiento de Vigo recibieron ayer por la mañana la notificación de la fiscalía de área de Vigo en la que descartaba que el Concello hubiese delinquido al no actuar en el caos de tráfico del nuevo hospital pero en la que también establecía que las competencias en esa materia son sin duda suyas. Sin embargo, el oficio llevaba fecha del día 12 de este mes. Y ese no fue un día cualquiera.

Porque fue un lunes, dos semanas antes de las elecciones gallegas y, además, fue el primer día en que el Concello de Vigo empezó a intervenir el tráfico del hospital.

El viernes 9, se produjo el accidente de tráfico en O Porriño. Como iba a recibir varios heridos, el Sergas llamó al Concello para que despejase la zona de urgencias de vehículos mal estacionados y acudieron tanto la grúa como varios policías locales. La campaña electoral comenzó ese mismo día.

El domingo 11 por la tarde, cuando apenas había gente en el hospital, la Policía Local apareció en el Cunqueiro y colocó conos en el vial de acceso principal, para que ningún coche pudiese estacionar la mañana siguiente.

El día 12, los conos hicieron su efecto. Ese día la fiscala de Vigo firmó su salomónica resolución. La campaña electoral estaba empezando.

Transcurrieron dos semanas de campaña electoral y el domingo 25 los gallegos acudieron a las urnas. Ayer, día 27, la fiscalía remitió su decreto a las dos partes, Sergas y Ayuntamiento.

Así que, casualidad o no, nadie pudo utilizar en campaña el oficio de la Fiscalía.