La basura bajo tierra da problemas

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

Las ratas y el agua estropean con frecuencia los mecanismos de los contenedores

19 sep 2016 . Actualizado a las 20:25 h.

Un transeúnte se aproxima a los contenedores subterráneos de la plaza de Compostela y hace un alto en el camino. No arroja la basura sino que alivia su vejiga ante el estupor de otros viandantes. Al darse la vuelta parece beodo y se pierde entre los jardines. En dicho lugar, la empresa concesionaria del mantenimiento de los depósitos de basura bajo tierra va a colocar una bomba de achique. El agua hace estragos en el mecanismo de funcionamiento de las isletas que ocultan los contenedores bajo tierra. Hay muchas estropeadas por toda la ciudad.

La bomba de achique es una de las condiciones que le ha impuesto el Concello a la nueva empresa de mantenimiento, Formato Verde. Hacerse cargo de los 222 colectores subterráneos que hay en la ciudad le reportará el próximo año más de 70.000 euros a cambio de trabajos de vigilancia y reparaciones frecuentes.

El contrato con dicha empresa acaba de ser aprobado. Formato Verde tiene que hacerse cargo del mantenimiento y reparación de los contenedores que se estropean. Y eso es algo muy frecuente. Rufino Santalices, presidente del comité de FCC, que se encarga de la contrata de recogida de basura, pone de relieve que los estropicios se deben, sobre todo, al efecto «de las ratas y de la lluvia». Para los roedores disponer de una gran cantidad de materia orgánica constituye una auténtica despensa. A pesar de las campañas de exterminio, los roedores siguen activos en el subsuelo y, en cuanto pueden, penetran bajo las isletas para devorar los restos de alimentos. Los recipientes son auténticos restaurantes de lujo para ellos.

Otro problema para el servicio es el agua. A pesar de que se ha mejorado en estanqueidad, lo cierto es que en otoño se producen lluvias torrenciales que desbordan las medidas de protección, inutilizando los mecanismos de elevación y ocultación de los contenedores.

El Concello no solo ha impuesto a la empresa concesionaria la instalación de una bomba de achique en el número 7 de la plaza de Compostela, sino también una reducción del tiempo de respuesta ante las incidencias que suceden a menudo. Para las averías de poca entidad, el tiempo previsto de solución es de cuatro horas, mientras que para las urgentes, el tempo máximo de reparación será de dos horas. La empresa también tendrá que incrementar la limpieza en los depósitos de basura. El Ayuntamiento obliga a llevarla cabo al menos una vez al año entre noviembre y diciembre.

La empresa Formato Verde se impuso en el concurso de mantenimiento a Contenur. Mientras Formato Verde obtuvo más de 48 puntos, Contenur no llegó a los 20. Al concurso se presentaron otras compañías que quedaron excluidas por diferentes motivos como Mantecer S.L., Ecolisistem y de Equipos y Servicios del Noroeste (Servinord).

Una empresa excluida del concurso no ha sido todavía informada

Los técnicos municipales han recomendado advertir a la empresa Mantecer para explicarle que no fue admitida en el proceso de licitación. El Ayuntamiento sí envió notificaciones a las otras empresas que se habían presentado para hacerse cargo de la adjudicación pero no consta la notificación a Mantecer. Como el procedimiento debe ajustarse a la normativa general, esta empresa excluida debe ser notificada oficialmente. Todas las condiciones impuestas a Formato Verde en cuanto a mantenimiento y limpieza deberán ser controladas por el jefe del servicio de Limpieza.

Exigen un seguro de responsabilidad de 200.000 euros al menos para casos de accidente

El Ayuntamiento le ha exigido a la empresa concesionaria del servicio un seguro obligatorio que garantice una cobertura mínima de 200.000 euros. Esa es la cantidad que tendría que desembolsar la empresa en caso de accidente grave. Hay que recordar que precisamente fue un siniestro mortal en Santiago de Compostela el que motivo que, durante años, los contenedores de Vigo estuvieran fuera de servicio. Había razonables dudas sobre su correcto comportamiento y nadie quería que se repitiese un suceso tan atroz que puso de punta los pelos de la ciudadanía.

El sistema de funcionamiento se pone en marcha desde un mando a distancia. Lo lleva el equipo de trabajadores que va en el camión de recogida de la basura, a cargo de la multinacional FCC. El mando acciona una mecanismo hidráulico que levanta el contenedor soterrado y lo vuelve a dejar en sus sitio. En esta maniobra apenas se tardan 28 segundos.