Caballero quiere constituir el Área Metropolitana antes de las elecciones autonómicas

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

SANDRA ALONSO

El alcalde afirma que la nueva la ley «tiene tanta relevancia como la creación de las provincias en su momento»

14 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La decisión está tomada. Por segunda vez en cuatro años, el Parlamento ha aprobado una ley del Área Metropolitana de Vigo, solo que en esta ocasión nada impide que le norma se aplique y previsiblemente con una larga vida. Ha salido adelante por unanimidad, algo desconocido en los 41 proyectos de ley de este mandato legislativo, y todo el mundo se declara encantado, detalles aparte.

Llegados a este punto, la clave ahora es su puesta en marcha efectiva, lo que precisará alrededor de tres meses, especialmente teniendo en cuenta que estamos en vísperas de las vacaciones políticas de agosto. Por este motivo, el calendario que maneja el alcalde de Vigo, y también futuro primer presidente metropolitano, es el de constituir la asamblea a mediados de octubre.

De esta forma, se cerrará el ciclo antes de que se celebren unos días después las elecciones autonómicas (previstas para el 16 o el 23 de este mes), lo que permitirá a los socialistas y también a los populares sacar pecho de que lo han logrado, aunque sea instantes antes de cerrar el crono.

De momento, habrá un segundo acto institucional relevante cuando el presidente Feijoo acuda a Vigo para firmar la ley este mes. Lo habitual es que lo haga en su despacho de Santiago, pero la pasada semana anunció que, ante su relevancia para el territorio, se desplazará de manera simbólica a la capital metropolitana. Y no solo metropolitana, ya que con la nueva ley Vigo alcanza el estatus de capital de provincia a efectos de servicios.

Es destacable que lo haya conseguido sin voces en contra, con todos los votos a favor y con absoluto respecto de la ciudad de Pontevedra y sus fuerzas vivas. El blindaje administrativo de Vigo siempre provocó reticencias en la capital, y en ocasiones algo más que reticencias. Esta vez, por el contrario, ni una sola e incluso en pleno proceso de reforzamiento de las relaciones institucionales de sus respectivos alcaldes, que en los últimos meses se han cruzado sendas visitas oficiales. En otras palabras, el clima político entre las dos principales ciudades de la provincia es mejor que nunca, y también las relaciones con la Diputación desde que la preside Carmela Silva, número dos de Caballero en el Concello vigués.

Una vez zanjada la ratificación por el presidente, el texto legal se enviará al Diario Oficial de Galicia para su publicación, momento en el que empezarán a correr todos los plazos. Resuelto este trámite, se notificará la situación a los catorce concellos a fin de que preparen la elección de sus representantes metropolitanos, una decisión que deberán ejecutar en los plenos de las respectivas corporaciones.

Si este proceso se desarrolla en agosto obviamente puede sufrir alguna dilación. Por eso se cuenta con el mes de septiembre para llevarlo a cabo, a fin de que en octubre, en la primera quincena, se proceda por parte de Caballero a convocar la sesión constitutiva de la asamblea y posteriormente de la junta de gobierno.

Organismo permanente

El alcalde vigués recalcó ayer la relevancia del nuevo organismo, «que no es algo coyuntural, sino una institución pensada para el próximo medio siglo o un siglo». Caballero le otorga una gran relevancia, que ayer equiparó «a la que tuvo la creación de las provincias en su momento».

No obstante, reconoce que la clave del organismo, al margen de su propia existencia, «es ofrecer mejores servicios y atender mejor a los a los ciudadanos», algo en lo que también insiste la oposición. Sin embargo, pone también el acento en que estando juntos los concellos en un organismo común «se compartirán más cosas y lograremos una mayor cohesión».

Por último, recalcó la importancia de acometer con celeridad la ampliación y el hecho de que la futura Área «tendrá 600.000 habitantes y frontera con Portugal. Quien no entienda eso no entiende nada», razonó.

Rubén Pérez (Marea): «En urbanismo é aséptica, non concreta nada»

El Área Metropolitana formalmente existirá en unos meses, pero su creación solo se justificará si logra mejorar la coordinación de los concellos y de los servicios que prestan. Lo reconocen todos los partidos y ayer el portavoz de la Marea expresó sus dudas de que se vaya a conseguir con el articulado de la ley aprobada.

«Fará falla de inmediato unha lei de financiación e tamén un regulamento para o transporte, xa a que a base da lei e moi aséptica. Tamén en urbanismo. Tal e como está redactada, poderían seguir os concellos aprobando cada un o seu plan xeral e seguir sumando vivendas en proxecto. E sumándoas todas, habería máis vivendas que cidadáns», ironizó.

Rubén Pérez es partidario en el caso de Vigo de que el Concello inicie la redacción de un nuevo Plan Xeral tras la anulación del anterior por el Tribunal Supremo hace ocho meses. Y que se aproveche para modificarlo en profundidad, reduciendo las 120.000 viviendas que se preveían en el documento anulado. Por ello, confía en que el Área sirva para coordinarse en esta materia con los demás ayuntamientos implicados.

La batalla de la Marea en el plano de los servicios es buscar una fórmula que permita prestarlos de manera conjunta, preferentemente por medio de empresas públicas «como fai a Área Municipal de Barcelona». Y trasladar el modelo a los que ahora están en manos de concesionarias privadas, caso del transporte urbano (Vitrasa) o agua (Aqualia).

Con carácter general, y basándose en lo ocurrido en los últimos años, Pérez vaticina que el Área puede convertirse en el escenario «dun choque de trens de PP e PSOE, que tentarán facer do organismo un instrumento político. Espero que non se cumpra o vaticinio», afirmó.

Elena Muñoz (PP): «Lo prioritario no es la ampliación, si no los servicios»

Caballero quiere poner en marcha la extensión del Área de inmediato, incluso antes de que empiece a tener contenido. Y no todos están de acuerdo. La portavoz municipal del PP, Elena Muñoz, reconoció ayer la validez de extender el nuevo ente «pues así está previsto en la ley», pero no lo cree prioritario. «Primero debemos saber qué se va a hacer, qué servicios se van a prestar y como va a funcionar». De esta forma se conseguirá, desde su punto de vista, afrontar «la oportunidad para mejorar servicios y que sean útiles a todos, de forma racional y eficiente».

Con este planteamiento, para la dirigente popular la aprobación de la ley «no es el final, sino el principio, «para que los ciudadanos perciban sus ventajas cuanto antes». Y un aguijonazo para Caballero en este contexto: «Ya sabemos que tiene probada experiencia en protestar; ahora debe probar su eficacia en construir».

Como aperitivo para después demostrar eficacia en el Área, Muñoz le ha reclamado una vez más al alcalde de Vigo que haga efectivo el convenio del transporte metropolitano y que Vitrasa se incorpore. «No se entiende que exigiese tanta inmediatez para la firma del convenio y los autobuses aún no estén adaptados cuando han pasado meses desde que aceptó entrar».

Para la portavoz popular, ese es «la primera tarea que tienen encima de la mesa Caballero», activando la integración de Vigo en el transporte «una vez firmado el mismo convenio que antes decía que era ilegal». «Vamos a pasar por alto que ha hecho perder un año a los vigueses, impidiendo que se beneficiasen de descuentos de hasta 1.000 euros anuales». El reto que le plantea Muñoz «es que Vigo entre de modo inmediato, este mismo mes» para compensar el retraso.

Un consenso que no duró ni 24 horas

Las heridas que causó el fallido intento de crear un Área Metropolitana bien distinta hace cuatro años no se ha curado con el bálsamo de que al final haya salido adelante casi como Caballero quería. En pleno éxtasis por este éxito político, el alcalde vigués no se privó ayer de volver a recordarlo. Y lo hizo menos de 24 horas después de acudir al Parlamento a presenciar el debate, en el que mantuvo diálogo y palabras amables con el conselleiro Alfonso Rueda, la parte contratante en la negociación metropolitana, y con Pedro Puy, portavoz del grupo parlamentario popular.

«Tengo una satisfacción inmensa ante una decisión que marca un futuro excepcional. Pero ha sido una batalla durísima, larguísima, de años, enconada».

Y de nuevo disparó por elevación contra el presidente, al que responsabilizó de aquel choque. «La ley tenía la oposición frontal de Feijoo, pero también del PP de Vigo», sentenció una vez más.

Por ello, se manifestó «encantado» de no haber tenido que asistir a una nueva confrontación con el nuevo texto. «Aquella era una estafa para Vigo, ya que consideraba a la ciudad igual que a Pazos de Borbén. Y lo digo con todos los respetos, pero Vigo tiene 300.000 habitantes y Pazos 3.000».

A la vez, el regidor se queja de que la nueva ley ha incluido la continuidad territorial como un requisito para la incorporación de nuevos concellos, a lo que se opone frontalmente. «Ello supone que A Guarda no podrá entrar si no lo hace previamente O Rosal, y eso no tiene sentido. ¿Y qué ocurre si después O Rosal decide irse? ¿Tendrá también que marcharse A Guarda?», se pregunta el regidor.

Y si Caballero tenía quejas, también desde la oposición Rubén Pérez (Marea) protestó de que no les hubiera permitido asistir al acto de la firma del convenio del transporte metropolitano. «No es una buena forma de empezar», afirmó.