Las cuentas pendientes de Rajoy con Vigo

d. pérez VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

El PP gana en la ciudad y esta vez el presidente no la pisó en campaña. Sus incumplimientos se arrastran desde el 2011

28 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras dos fracasos electorales, el PP vuelve a ser el partido más votado en la mayor ciudad de Galicia. Al contrario de lo que ocurrió en diciembre del 2015, cuando pensó que sería bueno un empujón del candidato, ahora la victoria se ha producido sin la visita de Mariano Rajoy. Hay factores que no son determinantes en las campañas.

Si finalmente logra formar gobierno y continuar en el cargo, el presidente podrá aducir que no ha adquirido ningún compromiso concreto con Vigo. Es cierto, pero también lo es que acumula muchos desde el 2011. Y no hay por qué olvidarlos. Los deberes pendientes son bien conocidos, aunque hayan estado casi ausentes en los debates políticos previos al 26J, a pesar de que son de Rajoy y de su ministra de Fomento y número uno del PP por la provincia de Pontevedra, Ana Pastor. Incluyen una salida directa en AVE a Ourense (para evitar el rodeo por Santiago), un trazado nuevo para la peligrosa autovía a O Porriño (hasta ahora solo se han acometido parches) y una biblioteca estatal (de la que nadie habla, pese a ser un compromiso popular que el alcalde continúa sin aprovechar poniendo a disposición una ubicación).

Esas inversiones están bloqueadas o aparcadas. También el impulso definitivo a la autopista del mar con Francia o la implicación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Campus do Mar de la ETEA.

La oposición haría su papel, igualmente, si chequease el impulso definitivo que deben recibir la ampliación de Rande (aún no han comenzado las obras en el puente), la conclusión de la macrodepuradora del Lagares (hay problemas con el emisario), el inicio de la reforma de la avenida de Madrid (lo ha comprometido en plena campaña la ministra) y la estación de Thom Mayne. Esta última entra en un episodio delicado del que deberá responder la propia Ana Pastor: el procedimiento negociado con las empresas que no se presentaron a los concursos previos.

Otras promesas que datan del 2011 puede que se las lleve el viento. Las circunstancias han cambiado y nadie parece demandarlas ya. Es el caso de la apertura las 24 horas del aeropuerto de Peinador, la autovía con Pontevedra alternativa a Rande y libre de peaje y la corrección del mapa europeo de transportes que condenó a Vigo como puerto secundario y no nodal. La crisis también se llevó por delante otra cuestión de peso que se le había demandado a Rajoy desde la ciudad y que él había asumido: la recuperación de un ministerio específico de Agricultura y Pesca. Ahora es de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

Caballero elude valorar los resultados y Elena Muñoz se los toma como estímulo

El PSOE fue tercera fuerza en la ciudad (40.000 votos frente a los 50.000 de En Marea y los 52.000 del PP) y a Abel Caballero le parece «muy bien» que cada vigués optase por lo que quiso. El alcalde evitó ayer hacer un análisis político de los resultados. Se limitó a señalar, como ya hiciera en noviembre, que no son extrapolables y que, de repetirse ahora las municipales, su lista sacaría incluso dos concejales más, pasando de 17 a 19 de los 27 que tiene la corporación.

En declaraciones a los medios, y por la insistencia de los periodistas, Caballero reconoció que los apoyos al PSOE en Vigo están «muy por debajo» del respaldo obtenido en los comicios locales. Subrayó que eso «es visible» aunque no quería parecer «pretencioso». «Los datos habla por sí solos», indicó el regidor.

El también presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) tampoco quiso referirse al futuro político que le espera a Pedro Sánchez. Se remitió a la próxima reunión del comité federal que celebrarán los socialistas.

La portavoz municipal del PP, Elena Muñoz, sí leyó los resultados en clave local. Tras posar con algunos de los candidatos en O Castro, señaló: «Hemos recuperado la mayoría en votos, hemos ganado las elecciones, y hemos conseguido que los vigueses conozcan y valoren, porque se lo hemos podido transmitir directamente, a pie de calle, todo lo que hemos hecho por esta ciudad y el proyecto que tenemos para el futuro». Muñoz dice tomarse la victoria en las generales como un estímulo «para seguir trabajando con humildad».