La Xunta investiga el uniforme de la sección especial de la Policía Local

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vazquez

La denuncia de un sindicato pone en la pista de una posible indumentaria irregular

20 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El gobierno municipal abordó en el mandato anterior la creación de una unidad de la Policía Local destinada a lidiar con las actuaciones más complicadas. Al modo de los antidisturbios del Cuerpo Nacional de Policía, dispone de una indumentaria diferente, medios distintos y agrupa a los agentes en mejores condiciones para desarrollar este cometido. El problema para el Concello es que puede haber superado los límites que la Xunta establece para los cuerpos de la Policía Local.

Tras recibir la denuncia de un agente en nombre del sindicato Casipol, sin representación en el Concello, el responsable de Emerxencias e Interior de la Consellería de Presidencia se ha puesto en contacto con el Concello para aclarar la situación existente. En el escrito que remitió al alcalde el pasado 8 de febrero, le da cuenta de la queja recibida y le pide información.

En concreto, le advierte de que sus agentes podrían estar utilizando «uniformidade de persoal antiregulamentaria», y le pide que le remita un informe al respecto. Aunque no entra en detalles, la investigación afecta de manera directa al GOA (Grupo Operativo de Apoio), una sección que integran casi 60 agentes del cuerpo local, aproximadamente la sexta parte de la plantilla.

Este grupo cuenta con uniformidad y medios distintos al resto de los agentes. Su uniforme es prácticamente negro, claramente diferente al azul del resto del colectivo policial local, disponen de chaleco antibalas y una boina que los diferencia al resto de la Policía Local viguesa.

Además de elegir a los agentes en mejores condiciones físicas, el Concello les ha dotado de medios materiales diferentes y sus vehículos llevan un león amarillo como signo distintivo.

El problema para el gobierno local es que existe una ley autonómica de coordinación de las policías locales del año 2007, y que esta uniformidad podría contravenir las disposiciones que allí figuran. Por eso, el director xeral de Emerxencias, Luis Menor, le pide al alcalde un pronunciamiento sobre estos hechos.

Bautismo de fuego durante el traslado del «Bernardo Alfageme» a la rotonda de Coia

Aunque la unidad se creó en el año 2013 con los agentes en mejores condiciones físicas, el estreno oficial del GOA no tuvo lugar hasta hace año y medio. En ese tiempo la ciudad vivió el conflicto social del Bernardo Alfageme, originado por la polémica decisión del alcalde de instalar el antiguo barco pesquero en la rotonda de Coia.

Durante tres meses se produjeron numerosos altercados de orden público en los que la Policía Local, fundamentalmente el GOA, se encargó de vigilar las obras en la rotonda para evitar que un grupo de vecinos las entorpeciera.

Y en la madrugada del 19 de febrero del 2015, la totalidad de sus integrantes vigilaron el traslado del barco desde un muelle de Beiramar hasta la rotonda. Junto con una nutrida dotación de antidisturbios de la Policía Nacional, esa noche compartió la responsabilidad del operativo, en una actuación poco habitual para agentes locales.

Coches sin escudo

Antes de que un sindicato cuestionara la legalidad del uniforme del GOA, el Concello vigués ya había bordeado la legalidad al no incluir el escudo autonómico en los coches de la Policía Local. Este olvido choca con la normativa autonómica y, de hecho, esa identificación la incluyen los vehículos de las demás ciudades gallegas. Sin embargo, la ley autonómica que ordena incluirlo no prevé qué hacer con los concellos que no lo hagan. La prueba es que dos años después en Vigo todo sigue igual.