Elena Muñoz acusa a Beiras, que anunció una proposición no de ley sobre el Cunqueiro, de hacer «las cuentas del gran capitán»
12 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La construcción del Hospital Álvaro Cunqueiro por parte de un conglomerado de empresas privadas se adivina como uno de los temas estrella de las próximas elecciones autonómicas. La oposición se ha comprometido a rescatar la concesión, por la cual la empresa privada lo gestionará durante 20 años a razón de un canon anual de 70 millones de euros, explotando a su beneficio los servicios no sanitarios. El jueves, Beiras anunció en Vigo que AGE presentará una proposición no de ley en el Parlamento gallego para rescatar el complejo pagando 69 millones.
Para la portavoz municipal del PP, ese hipotético rescate «supondría un grave deterioro para las cuentas públicas de la comunidad». Elena Muñoz, que fue conselleira de Facenda cuando se gestó el proyecto, acusó a Beiras de hacer «las cuentas del gran capitán» y cifró en más de 400 millones el coste que tendría para las arcas públicas una operación de ese tipo, teniendo en cuenta lo que costó construirla.
Ante ello, exigió a socialistas y AGE (Alternativa Galega de Esquerda) que «señalen qué servicios quieren que se dejen de prestar» para hacer frente al rescate de la concesión.
Indiferentes al argumento económico, esta misma semana había acudido a Vigo también el máximo responsable del PSdG-PSOE, José Ramón González Besteiro. Como Beiras, sostuvo que, si de ellos depende, tras las autonómicas se iniciará el proceso de rescate.
Ambos grupos enmarcan esta iniciativa en la promesa de una mejora de la asistencia y en la necesidad de dotar al hospital de las 1.450 camas prometidas.
Besteiro estuvo acompañado del alcalde, Abel Caballero, y de la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, que desde hace más de un año mantienen una guerra abierta contra el sistema de gestión público-privada del Álvaro Cunqueiro. El exponente más visible ha sido sus criticas casi diarias contra el aparcamiento de pago de la instalación. Esto provocó que el Sergas negociara con la concesionaria una importante rebaja y que se gestionaran 500 plazas gratuitas para el personal.
Pese a todo, los ataques desde el ámbito municipal se suceden y Caballero mantiene su negativa a que la Policía Local y la grúa intervengan dentro del recinto del hospital. Debido a ello, los usuarios aparcan en lugares prohibidos y se complica el tráfico.