Raphael se pone ahora sinfónico

La Voz

VIGO CIUDAD

XOAN CARLOS GIL

El cantante andaluz adapta su amplio repertorio con la compañía der la Orquesta Gaos

11 mar 2016 . Actualizado a las 04:00 h.

El sentido del humor ha llevado a Raphael a titular como Sinphónico la gira que esta tarde se detendrá, a las 20.30 horas, en el auditorio Mar de Vigo. El guiño humorístico está basado en la adaptación que el cantante ha hecho de su repertorio a la participación de una orquesta. En este caso, contará con la presencia de la Orquesta Gaos. «No sabes la gran sorpresa que me he llevado viendo la cantidad de grandes orquestas sinfónicas que hay en nuestro país», reconocía esta misma semana a La Voz.

Raphael, tras 55 años sobre los escenarios, ha querido volver a sorprender a su público, presentando por primera vez una gira sinfónica. «Lo he estado esperando 55 años, trabajando para que al fin llegara. Todo este tiempo, paso a paso, sin prisas pero a conciencia. Y aquí está. La ilusión, el sueño de mi vida siempre fue este: cantar y llevar al público mi espectáculo acompañado y protegido por una gran orquesta sinfónica», reconoce el cantante.

«La orquesta revaloriza las canciones de un manera grandiosa. El Qué sabe nadie cantado por mí con una sinfónica te lleva a unos momentos de clímax impresionantes», afirma, para añadir: «Es una fiesta ver al público. Como yo te amo o En carne viva son piezas tan sinfónicas que en este formato encuentran su vía perfecta de expresión».

Raphael afirma mantener una disciplina personal que le permite seguir saliendo al escenario y recibiendo el aplauso del público. «Cuando termino un concierto yo digo: ¿Y mañana, qué? ¿Se repetirá todo eso de la gente aplaudiéndome? La gente que tiene ese concepto de la disciplina jamás se deja llevar por la vanidad. Yo no tengo que sobrevalorarme porque ya lo hace la gente», reflexiona.

El cantante se define como una persona apasionada en todas las facetas de la vida, lo que le permite mantener la ilusión en su carrera. «No soy nada parco. Si tengo que gritar, grito. Si tengo que reír, río. No me dejo nada en la trastienda. Puede que alguien del público me vea así, pero bendita exageración, en todo caso. Yo lo que no soy es un soso. Eso nunca», concluye.

Para este concierto solo quedan disponibles unas cien localidades entre los sectores C1 y C2, cuyos precios oscilan entre los 60 y los 68 euros. Las localidades están a la venta a través de www.ataquilla.com y en la central de espectáculos de la calle Velázquez Moreno.