Los órganos rectores de la ciudad cuentan con más representación femenina que hace una década, aunque los puestos clave siguen ocupados por hombres
08 mar 2016 . Actualizado a las 12:02 h.El test de Bechdel, un sistema para evaluar la brecha de género en obras de ficción, sobre todo en las películas, daría negativo si se aplicara a los consejos de administración, empresas e instituciones locales. Para pasar la prueba, tiene que haber al menos dos personajes femeninos, hablar entre ellas en algún momento y hablar de algo más que no sea un hombre. Parece fácil, pero no es así. La mayoría de las películas no superan la prueba. Tampoco lo hacen la mayor parte de las entidades y órganos que aglutinan el poder económico, educativo y social en Vigo. En muchos de ellos, si hay una mujer, no tiene otra con la que hablar. Ni de hombres, ni de nada.
Solo cuando la ley obliga, el número de representantes femeninas en un órgano de gobierno, sube. Ocurre, por ejemplo, en el Concello de Vigo, que cuenta con ocho concejalas y en mismo número de concejales. Ahí se acaba la historia de la paridad.
A partir de aquí, la vida real. Por ejemplo, en el recién constituido consejo de administración de Pescanova (la pasada semana), de doce consejeros, la única mujer es la exministra Elena Salgado.
En la Universidad de Vigo, que encabeza por segundo mandato consecutivo el rector, Salustiano Mato, la composición del equipo de gobierno se divide en siete vicerrectorías. Cuatro llevan encabezamiento masculino y tres femenino, aunque empatan con la secretaría general, que está a cargo de Gloria Pena Urís.
La delegada del Estado en el Consorcio de la Zona Franca es una de las pocas mujeres que ocupan un destacado puesto de poder en los centros de decisión. La política pontevedresa, licenciada en Derecho ocupa el cargo desde el 2012 en un organismo donde ocupa el cargo de presidenta del comité ejecutivo y vicepresidenta del pleno, que tiene 16 miembros y solo siete de ellos son mujeres. «Las mujeres han avanzado en el camino de la igualdad en el ámbito de la política, donde hay hasta una candidata a la presidencia de los estados Unidos. Pero en el mundo laboral no se ha recorrido todavía ese camino. Lo que es verdaderamente sorprendente es que nunca haya habido una secretaria general en un sindicato de clase, ni en Galicia ni en España, ni una presidenta de la CEOE», reflexiona en torno el Día de la Mujer Trabajadora.
Mundo laboral
En relación directa a su puesto laboral, indica que «sorprende también que en los programas de emprendimiento que se realizan en Zona Franca, la presencia de los hombres es muy superior. Considero que es en el mundo de la empresa donde hay aún mucho camino por andar», resume.
Amelia Pérez, secretaria general de Comisiones Obreras en Vigo, es de las pocas féminas en el mundo masculino de los sindicatos. Ella misma da fe. «Es un sector en el que sigue habiendo mucho machismo», asegura. En los sindicatos comarcales de Comisiones, las áreas en las que se divide están representadas en un 40 % por mujeres, sanidad y servicios a la ciudadanía. «Pero a mí no me vale. Hace cuatro años éramos un 50 %, pero sería significativo que una mujer ocupara el cargo en área de Industria. A nivel confederal no hay ninguna mujer y los que rigen las federaciones son todos hombres», aprecia. Pérez tiene claro qué es lo que falla en el sistema: «Para que haya igualdad tiene que haber educación en igualdad y en este momento, es algo que todavía no existe. Y con eso no se acaba en un día, es un proceso muy lento. El techo de cristal sigue ahí», explica.
María Pérez, que preside la Federación de Vecinos de Vigo, echa de menos que la presencia femenina en este ámbito sea casi anecdótico, como demuestran las cifras. «De las 28 asociaciones de vecinos que forman parte de la federación viguesa, solo seis tienen presidenta: Candeán, San Andrés, Cristo de la Victoria, Freixeiro, As Nosas Rúas de Travesía de Vigo y Camiño Vello, de Coia», contabiliza.
En cuanto al movimiento empresarial, la Cámara de Comercio de Vigo registró en el último año una menor actividad femenina en lo que respecta a la creación de empresas, pasando de 329 consultas en el 2014 a 309 en el 2015.
La Federación de Empresarios tiene tres mujeres en su comité directivo en el que hay 37 miembros electos. Encarna Álvarez ocupa la vicepresidencia en un comité en el que también está la presidente de AJE Pontevedra, Lucía Pedrosa, y Carmen Fernández vilas, relaciones públicas de Mercadona para Galicia. Por su parte, en la junta directiva del Círculo de Empresarios de Galicia (CFV) hay cuatro vocales entre los 18 miembros de la junta directiva.
Hace 10 años
Hace una década, la situación no era especialmente brillante. En el Concello había 11 mujeres entre los 27 miembros del pleno municipal. Ahora son 12 de 27. En el pleno del Consorcio de la Zona Franca eran dos mujeres entre 20 hombres. Ahora son siete. En el consejo de administración del Real Club Celta había un 0-8. Ahora estamos 1-7 y además, la directora financiera es una mujer: María José Herbón. La Autoridad Portuaria la dirigía Luis Lara. Ahora está dirigida por una mujer, Beatriz Colunga. Al frente del Consello Económico y Social de Galicia sigue Corina Porro, exalcaldesa de Vigo.