«Lamento que haya tenido que hacer público mi problema para que lo solucionen»
Ángel Carlos Álvarez se congratulaba ayer de que por fin pueda acceder sin problemas a los autobuses de Vitrasa con su silla de ruedas motorizada pero, al mismo tiempo, lamentó que haya tenido que hacer pública su queja para que se le haya buscado una solución. «Es curioso que cuando una persona llama a los medios de comunicación para poner en vergüenza a una empresa privada, la cosa empieza a funcionar», declaró. Afirma que hasta entonces no fue así. «Tengo testigos de que cuando la prensa no estaba enterada de lo que me pasaba, las rampas no funcionaban, qué curioso que ahora funcionan cuando salgo en los periódicos y en la televisión», añadió. Sobre la respuesta del alcalde ordenando a la empresa que haga accesibles los autobuses a todos los usuarios, manifestó que «las palabras están muy bien, pero se las lleva el viento, quiero hechos, no me vale con palabras».
Carlos llegaba tarde a sus clases en el instituto de Chapela porque varios autobuses del servicio de transporte público no lo podían recoger al no tener operativas las rampas de acceso en silla de ruedas. Esta situación le obligaba a salir con una hora de antelación como mínimo de su casa en Teis para evitar tener que llegar tarde. Para regresar a su casa también debía dejar el aula con 45 minutos de antelación.