La intención del último editor del poeta es que sea la ciudadanía de Vigo quien contribuya a pagar la escultura
30 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.«Queremos iniciar una suscripción popular para pagar la creación de una estatua de Carlos Oroza», afirma Javier Romero. El último editor del poeta fallecido a finales del pasado año cree que será el elemento perfecto para complementar el homenaje de la ciudad a este hombre que eligió hace muchos años Vigo como su hogar.
«Pretendemos que la gente aporte la cantidad que sea, por mínima que parezca, con el fin de que la estatua sea una muestra de cariño hacia su figura», añade Romero.
Carlos Oroza falleció en el Hospital Álvaro Cunqueiro el pasado 21 de noviembre. Tenía 93 años de edad. Había nacido en Viveiro y pasado por las filas de la contracultura en Madrid y la Ibiza de los hippies, donde conoció a la Nico, que cantó con la Velvet Underground.
En la década de los setenta se instaló en Vigo para no abandonar ya nunca más la ciudad. Carlos Oroza no tiene una producción muy grande plasmada en libros porque se consideraba un rapsoda, un poeta al servicio de la oralidad. Y elevó esta forma artística hasta sus más altas cotas.
Desde ayer tiene una calle en la ciudad y, si la ciudadanía quiere, también tendrá una escultura en el futuro.