La Xunta le da un piso de la Sareb a la familia que iban a desahuciar

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

<span lang= es-es >Jornada de ayuno y silencio</span>. La Red Solidaria Popular de Vigo y el Foro Socioeducativo Os Ninguéns emprendieron ayer una jornada de ayuno y silencio de 24 horas para pedir soluciones en los casos de desahucios. Comenzó ante la Xunta y siguió en las escaleras del Marco para terminar en el Concello.
Jornada de ayuno y silencio. La Red Solidaria Popular de Vigo y el Foro Socioeducativo Os Ninguéns emprendieron ayer una jornada de ayuno y silencio de 24 horas para pedir soluciones en los casos de desahucios. Comenzó ante la Xunta y siguió en las escaleras del Marco para terminar en el Concello. XOán carlos < / span>gil < / span>

Ante la falta de acuerdo con el Concello de Vigo para solucionar el problema, decide afrontarlo por su cuenta

09 jul 2015 . Actualizado a las 04:00 h.

La Xunta de Galicia ha ofrecido un piso a la familia que iba a ser desahuciada este mes, integrada por una madre de 47 años, dos hijas y el bebé de una de ellas. La vivienda procede de las cincuenta cedidas a la Xunta por la Sareb (Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria), conocida también como banco malo, y es la primera de este origen que se cede en la ciudad a una familia.

La Consellería de Medio Ambiente (a la que pertenece el Instituto Galego da Vivenda e Solo) remitió una carta días atrás al Concello para solucionar de forma conjunta el problema de esta familia viguesa. Pese al contacto mantenido con los servicios sociales del Concello, no se llegó a ningún acuerdo, por lo que la Consellería decidió asumir la responsabilidad para evitar pasar el mal trago a esta familia.

Las afectadas ya presentaron ayer en la delegación de la Xunta en Vigo los documentos correspondientes, que tendrán que acompañar de un informe de los servicios sociales del Concello. Esperan que como ya ha sido emitido para solicitar la risga, concedida recientemente por la Xunta, no tengan que esperar tanto como en aquella ocasión, en concreto siete meses.

Fuentes de la administración autonómica explican que ya han resuelto más casos de este tipo en distintos puntos de Galicia, aunque se lleva con discreción por lo delicado del tema.

La familia de M. B., que este mismo mes iba a ser desalojada por no pagar el alquiler de su vivienda, no se lo puede creer. Cada día que pasa es un día de angustia y hasta que no se vean con las llaves del piso no descansarán. Las cuatro personas viven ahora con la renta de integración social de la Xunta. En el momento de ser denunciadas por el propietario del inmueble debían 750 euros, aunque en la actualidad ya supone el doble. El colectivo Os Ninguéns se movilizó desde un principio para buscar una solución y escribió cartas al presidente de la Xunta y al alcalde de Vigo. La Consellería de Traballo también ofreció su colaboración al Concello por carta.