El colectivo denunció a la dirigente socialista por llamarlos «nazis» y le reclama 78.000 euros y una rectificación
18 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La concejala y diputada Carmela Silva no acudió ayer al acto de conciliación convocado por un juzgado de Vigo tras la denuncia presentada por la Asemblea Aberta de Coia. La dirigente socialista los calificó de «nazis» y de ejercer la violencia en Twitter meses atrás en pleno conflicto por la colocación del barco. Una vez que trascendió el insulto, Silva lo retiró de su cuenta. La política denunciada no quiso en estos meses comentar el incidente. Ayer tampoco lo hizo y Caballero se negó ayer en su rueda de prensa a hablar de este asunto.
Fuentes de la Asemblea Aberta recalcaron que tras no comparecer y, por tanto, negarse a rectificar el calificativo de «nazis», seguirán adelante con la denuncia. Lo explicaron después de la concentración que un grupo de opositores al Alfageme protagonizó ayer a la hora de la conciliación.
El colectivo vecinal no entiende que pese a la repercusión que tuvo el tuit «Carmela Silva non pedíu desculpas», lo que le exigen y una indemnización de 78.000 euros. Insistieron en que «en todo momento a nosa loita foi non violenta e festiva malia sufrir as mentireiras declaracións dun goberno municipal obsesionado por agochar as xustas motivacións da xente». Se quejan de que ellos padecieron «os excesos» de la Policía Local y de denuncias contra manifestantes.
La candidatura a la presidencia de la Diputación, ratificada
La comisión federal de listas ha ratificado a Carmela Silva como candidata del PSOE a presidir la Diputación de Pontevedra. No existía duda alguna de que fuera a ser así, pero el alcalde lo confirmó en la mañana de ayer. Según explicó Caballero, mantuvo una conversación con César Luena, secretario de organización del PSOE, quien le confirmó que la propuesta tenía ya vía libre y era por tanto oficial.
A partir de ahora, lo que necesitan los socialistas es cerrar un pacto con el BNG, cuyos cuatro votos son imprescindibles para lograr la mayoría absoluta. Como pasaba con su candidatura, se trata de un acuerdo que nadie duda que se vaya a producir.
El resultado de las elecciones del 24 de mayo mantuvo al PP como primera partido con 12 diputados, pero sin mayoría absoluta. Los socialistas consiguieron 10, el BNG 4 y el restante la Marea. De esta forma, y por primera vez, socialistas y nacionalistas están en condiciones de gestionar la Diputación.
Del lado nacionalista no se prevén obstáculos, aunque hubo quejas por conocer el nombre de Silva por los medios de comunicación. Además, el BNG de A Coruña exige la presidencia por dar al PSOE Lugo y Pontevedra.