Los dos policías locales que lo responsabilizan de la agresión testificarán el jueves en el juzgado
10 mar 2015 . Actualizado a las 13:33 h.El conflicto de Coia ha entrado en una fase de distensión una vez que el barco «Bernardo Alfageme» está colocado en la rotonda por decisión del alcalde pese a la oposición política y social existente. Sin embargo, sus consecuencias siguen coleando, incluidas las denuncias judiciales interpuestas por agentes municipales por incidentes en los desalojos.
De hecho, un primer vecino, Xurxo Romero, ya fue condenado a un año de cárcel y multa de 1.100 euros por desobediencia a los policías, aunque la acusación más grave, la de atentado, que le podía haber llevado a ingresar en prisión de manera efectiva, no fue tenida en cuenta por la juez. No obstante, este fallo judicial ha sido recurrido por el afectado ante la Audiencia provincial.
Esta situación se va a repetir ahora ya que pasado mañana testificarán ante el juez dos agentes que acusan a otro vecino, Diego Lores, persona muy vinculada a la parroquia Cristo de la Victoria, también de agresión y atentado. Tras el informe de los forenses y el testimonio del propio Lores la juez decidirá sobre este segundo caso.
De momento, la Asamblea Aberta de Coia, organización que lideró las movilizaciones contra la colocación del pesquero en la rotonda, ha convocado una concentración de protesta ante los juzgados el jueves a las 9,30 horas, en respaldo de Diego Lores. En la convocatoria piden a los policías que «conten a verdade que non contaron nos atestados».