El alcalde ha enajenado 15 de las 40 viviendas municipales de Rosalía de Castro
17 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello vigués quiere seguir la estela del Gobierno de Aragón, que acaba de obtener 80 viviendas de la Sareb, el llamado banco malo, para destinarlas a usos sociales ante la imposibilidad de venderlas. El proyecto municipal pretende ayudar a personas en difícil situación económica, pero la iniciativa contrasta con el hecho de que el gobierno local ha vendido en los últimos meses 15 de los pisos municipales de Rosalía de Castro y trata igualmente de deshacerse de otros 25, para los que no encuentra comprador pese a los esfuerzos realizados.
La opción social del ejecutivo de Caballero ofrece dos versiones contrapuestas: decide alquilar a precios reducidos las 32 viviendas de su propiedad en un edificio de Navia, para aminorar los efectos dramáticos de la crisis. Esta política tiene por escenario un barrio popular en el que todas sus viviendas, unas 4.000, han sido construidas por iniciativa pública. En cambio, es titular desde hace dos décadas de 40 pisos en la calle República Argentina, dentro del ámbito urbanístico conocido como Rosalía de Castro, a las que nunca dio utilidad.
Tras su legalización, Caballero y su concejala de Urbanismo, Carmela Silva, con el respaldo del PP, decidieron ponerlas a la venta con el argumento de financiar la adquisición de terrenos para la Ciudad de la Justicia. A esta medida se opuso, sin éxito, el grupo nacionalista, que reclamó darles un uso social.
La queja del BNG ponía el acento en un dato curioso: la disposición municipal a entregar a familias sin recursos los pisos de Navia, que en ningún caso se planteó vender, mientras los 40 de Rosalía se enajenan con un argumento débil ya que podía comprar la parcela judicial por otras vías. Fuentes municipales reconocen que el alcalde evitó instalar a familias de escasos ingresos en una zona como Rosalía de Castro, donde el precio de la vivienda es elevado, para evitar un posible conflicto ciudadano.
El problema para Caballero es que el mercado no está para operaciones masivas de venta de viviendas. Así, en junio pasado, tras una importante campaña publicitaria, el Concello solo consiguió colocar 12 de las 40 viviendas. Ante el limitado éxito decidió en octubre prorrogar el proceso de venta durante un año, pero en cinco meses solo han sido 3 los pisos adjudicados en esta segunda venta por un importe de 2,5 millones de euros.
Ejemplo aragonés
Aunque de manera pública no ha facilitado información, lo que el Concello pretende es que la Sareb haga en Vigo algo parecido a lo ocurrido en Aragón, a cuya comunidad autónoma le ha cedido 80 viviendas durante cuatro años, prorrogables, para destinarlas a alquileres sociales. Los precios a las que se ofrecen oscilan entre 75 y 300 euros, en función de las características de los pisos y los ingresos de los destinatarios. Se trata del segundo acuerdo tras uno anterior con Cataluña, donde la Generalitat recibió 600 viviendas a mediados del año pasado.
Los precios a los que se ofertan encajan con la oferta realizada por el Concello vigués en Navia, que se entregaron también por un período limitado y alquileres entre 100 y 200 euros.
En Rosalía de Castro ni se contempló una opción similar pese a que en la ciudad se produjeron a lo largo del 2014 casi 600 desahucios de propietarios e inquilinos. El gobierno municipal prefiere tener los pisos cerrados y hacerse cargo de los gastos que generan (comunidad, IBI que no ingresa y el pago de tareas de mantenimiento y pintura para su puesta a la venta), mientras convierte a funcionarios en agentes inmobiliarios. Todo por no llevar allí inquilinos sociales.
Esquerda Unida reclama un censo de casas de titularidad municipal
Para ayudar a personas y familias desahuciadas o en riesgo de exclusión social lo primero es conocer los bienes de que dispone el Concello. Por este motivo, Esquerda Unida reclamó ayer con carácter urgente un censo público de inmuebles de titularidad municipal, incluyendo vivendas y también locales de todo tipo. Según su portavoz, Rubén Pérez, la finalidad «é evitar de xeito urxente que familias de Vigo se queden sen vivenda polos despexos», como ocurre con frecuencia.
Se trata de una reclamación que EU viene planteando desde el 2010 sin que haya sido atendida. Además, Pérez sugiere a la Xunta que le traspase al Concello viviendas de profesores existentes en el municipio y que están sin uso. Asegura que las hay en numerosos centros educativos, en su mayor parte «en absoluto abandono».
Responsabiliza de la situación a los sucesivos gobiernos municipales de distintos colores políticos, a los que acusa de «artellar unha estratexia de abandono de políticas de intervención pública en materia de vivienda». Pérez recuerda que existen empresas municipales de vivienda en muchos concellos «que xestionan parque de vivenda propio, resultado de cesións, embargos a constructoras, etcétera, parte do cal incorporase a un fondo social para familiar sen recursos».
En el caso de antiguas viviendas de profesores, la vía que propone EU para darles uso social es un traspaso similar al planteado para la Sareb: un convenio entre ambas administraciones, Concello y Consellería de Educación, para delimitar la aportación de cada una y el sistema de gestión.
Viviendas vacías
El dato que aporta este partido es que un 18 % de las viviendas existentes en Vigo están vacías, una situación de la que también es partícipe el Concello con las de Rosalía de Castro. Sin citar este caso, Pérez alude a que «dentro de esta bolsa seguro levamos unha sorpresa do número de vivendas de titularidade local por procesos de asimilacións de vivendas sociais, de antigas empresa públicas ou do antigo Ministerio de Vivienda dos anos 70 e 80».
Lo hace extensivo también a locales de titularidad municipal fruto de convenios con constructoras, que «eventualmente» puede adaptarse a viviendas sociales, y lamenta «o absoluto oscurantismo sobre o patrimonio inmobiliario público da cidade».
El complejo deportivo de Navia, para después del verano
Aunque el alcalde, que ayer visitó las obras con varios concejales (foto superior), quería que estuviera terminado para las elecciones municipales de mayo, los vecinos de Navia tendrán que esperar unos meses, hasta finales del verano. Para entonces entrará en servicio el complejo de agua que está construyendo el Concello a imagen de los ya existentes en A Florida y Barreiro, iniciados en la etapa de Corina Porro (PP) pero inaugurados en el primer mandato de Caballero. En este caso se trata de dos piscinas cubiertas, un spa y un gran gimnasio, además de ocho pistas de pádel cubiertas. Antes de la elecciones funcionarán un campo de fútbol 7 y una pista polideportiva.