México es el principal cliente de una cartera vacía de armadoras españolas. Navieras como Suardíaz, Balearia o Armas se han caído
07 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La construcción naval gallega empieza a dejar atrás la crisis que venía arrastrando desde el 2011, cuando la Comisión Europea declaró ilegal las bonificaciones fiscales que ayudaban al sector a contratar barcos (el viejo tax lease) por considerar que vulneraban la libre competencia.
Después de casi tres largos años de dique seco, fuera del mercado por carecer de incentivos para las armadoras frente a la dura competencia (Holanda, Noruega, Francia...), en la segunda mitad del 2014 el naval español empezó a dar señales de vida y, poco a poco, las buenas vibraciones han empezado a llegar también a Galicia.
Así lo confirma el boletín sobre construcción naval en España que elabora el Ministerio de Industria con periodicidad trimestral y que, actualizado a diciembre del 2014, constata una recuperación de los astilleros gallegos. Según el informe, Galicia vuelve a ganar peso al cerrar el ejercicio con un 33 % de la cartera de pedidos contratada en España, un porcentaje que la sitúa otra vez por delante de Asturias (23 % de los pedidos), aunque por detrás del País Vasco, un rival difícil de batir ya que a lo largo de todo el 2014 ha sido la comunidad que ha cerrado más operaciones hasta copar el 47 % de toda la actividad.
Galicia llegó a acaparar el 50 % de la contratación naval que se hacía en España en el quinquenio fantástico (2005-2010). Ese récord queda lejos. Dice el sector que será difícil de batir, entre otras cosas, porque desde entonces algún astillero se ha quedado por el camino.
Curva de pedidos al alza
Pero la curva que dibuja el balance del último trimestre del 2014, en el que además todavía no se incluyen contrataciones muy recientes firmadas en el arranque del 2015 en el sector privado, apunta un cambio de tendencia hacia la recuperación.
En total, los astilleros españoles cerraron el 2014 con 48 buques solicitados, de los que una decena se construirán en las gradas gallegas.
Llama la atención que de la cartera de pedidos prácticamente han desaparecido las compañías armadoras españolas que durante décadas la engordaron, como Suardíaz (concesionaria de la Autopista del Mar de Vigo), Armas o Balearia, que construyeron en astilleros gallegos parte de su actual flota.
Según el boletín de Industria, la compañía de remolcadores Ibaizabal es la única clienta española de los astilleros gallegos, más en concreto, de Armón Vigo (filial de la compañía con sede en Asturias), a quien ha contratado un buque.
El resto de los encargos han llegado de la mano de armadoras extranjeras. Por países y volumen de carga de trabajo (por el tipo de buque), México es el principal cliente de los astilleros gallegos, con tres buques, dos contratados por PMI Norteamérica (filial de Pemex) en Hijos de J. Barreras y Navantia; y uno firmado por la armadora Hersea con Armón Vigo.
Además de México, Noruega se mantiene como un fiel cliente de los astilleros gallegos, sequida de Angola.