«Aceites Abril» impone su ley en el Conde de Gondomar

juan ares VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Los hermanos Pérez Canal llevaron al «Aceites Abril» al triunfo.
Los hermanos Pérez Canal llevaron al «Aceites Abril» al triunfo.

El Castrosúa fue el gran rival hasta la jornada final en Baiona

29 jul 2013 . Actualizado a las 06:00 h.

Aceites Abril, el poderoso First 44.7 armado por los hermanos Pérez Canal resultó vencedor del XXXVIII Trofeo Conde de Gondomar organizado por el Monte Real Club de Yates de Baiona en un apretado final con el Castrosua de Willy Alonso. El barco del Real Club Náutico de Vigo empató a puntos con el IMS 42 de Alonso, pero se llevó la victoria al ganar en la última prueba disputada ayer, un barlovento sotavento en la ría de Vigo en el que solo acabaron cinco barcos debido a las condiciones duras de las dos últimas jornadas.

Entre los barcos más grandes, de las clases ORC 0-1 tras el Aceites Abril y el Castrosua, se clasificó el Arroutado 2 llegado del Club Náutico de Portosín llevado por José Manuel Pérez, ya que el Cenor Electrolux no tomó parte en la última prueba al detectarse una vía de agua minutos antes de iniciar la misma, mientras el Pairo 8 de Margarita Cameselle tuvo que retirarse también por una avería.

En la clase ORC 2 Ramón Ojea, a la caña del Bosch Comunication Center fue el protagonista al llevarse un holgado triunfo tras ganar tres pruebas y ser el único que consiguió completar las cuatro disputadas. El podio lo completaron el Cachete del Club Náutico de Sada, llevado por Francisco Edreira y el Codaste de Nacho Campos.

El Luna Nueva, un J80 llevado a la caña por su armador Juan Luis Tuero resultó vencedor de la clase ORC 3, por delante del Enxuto de Pablo Conde y del Margen do Azul III de Frederico Lopes.

Este XXXVIII Trofeo Conde de Gondomar se ha caracterizado por las cambiantes condiciones climatológicas en las que se ha disputado. Si en la primera etapa, la larga subida hasta el Carrumeiro Chico en Finisterre, con regreso a Baiona se caracterizó por la bonanza climatológica, con buena temperatura, ausencia de ola y un viento medio que se tornó en flojo en el último tramos entre las islas de Ons y Cíes, la segunda etapa del sábado, con la vuelta a Ons tuvo como constante un fuerte viento del sur, en algunos tramos por encima de los veinte nudos, con mucha ola, que ya causó algunos problemas a los barcos participantes. Ayer el viento no dio tregua y el barlovento-sotavento resultó muy exigente para toda la flota.