El dueño de la casa tiroteada actuó por su cuenta y luego informó a la policía
07 dic 2012 . Actualizado a las 11:21 h.El dueño de la casa tiroteada en Vigo relató ayer que él mismo descubrió al autor del disparo gracias a un puntero láser que compró en unos grandes almacenes horas después de hallar la bala incrustada en el colchón de su hijo de cinco años. El propietario, que prefiere guardar el anonimato, explicó que orientó el puntero en la dirección del agujero del proyectil en su persiana y el aparato de medición le indicó «con exactitud» el balcón o ventana desde el que le habían disparado.
El morador del chalé adosado dice que el tiroteo ocurrió en la madrugada del sábado 10 de noviembre, pero su hijo no se enteró porque dormía. Tras ver los daños en el cuarto, le dijo al niño que un temporal -esa noche hubo calma- arrojó una piedra contra la ventana. «No quise preocuparlo, pero tomamos precauciones», relata.
Esa misma mañana, los investigadores inspeccionaron la habitación pero, según el perjudicado, «no tenían medios» para hacer las mediciones. «La cámara de fotos se les caía porque no tenían donde apoyarla, no traían varitas ni puntero y dijeron a ojo que el disparo venía del edificio de enfrente», relató. La policía recomendó a su familia marcharse unos días, pero optaron por mudarse a las habitaciones del frontal, alejadas de la ventana rota, que ya arregló.
Esa misma tarde «usé el sentido común», dijo, y compró un puntero láser «como esos para marcar en las pizarras». «Tuvimos miedo pero supusimos que fue un accidente porque no le hemos hecho mal a nadie, esto fue algo puntual», dice. No indagó sobre la identidad del vecino que residía allí, pero reveló sus pesquisas a los investigadores cuando le visitaron por segunda vez. Los agentes obtuvieron luego el mismo resultado con un puntero oficial.
Durante un mes, el vecino guardó silencio por orden policial para facilitar la captura del sospechoso. «Estoy dolido porque nadie me dijo nada del arresto; lo vi en prensa», dijo.