Y veintidós años después... nevó

L.M. / A. M. / M.T.

VIGO CIUDAD

La bajada de temperaturas llevó copos a municipios como O Porriño y Tui, donde no se veían desde el 1987, y dejó una alfombra gruesa en la comarca de A Paradanta

10 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

«Tengo 30 y la última vez que vi nevar en el centro de O Porriño era un niño». Ayer fue el día de la memoria. Muchos retrocedieron a enero del 1987, cuando la nieve llegó a las puertas de Vigo y entró hasta la cocina. En esta ocasión se quedó en el rellano, en Puxeiros, el Cuvi y los alrededores, que amanecieron con una ligera pero novedosa capa blanca. Otros más afortunados rememoraron aquellas fechas desde Tui y O Porriño, donde los copos visitaron los cascos urbanos por primera vez en veintidós años. Apenas cuajó y hacia el mediodía casi no había resquicios. Las parroquias y los puntos más elevados conservaron este frío por más tiempo, tanto en esta zona, como en el resto de A Louriña o la comarca de O Condado.

Aquí los copos sorprendieron a los vecinos de Ponteareas, Mondariz y Salvaterra con una pequeña visita, que en el caso de As Neves, no se recordaba desde mediados de los 90. «No casco urbán estamos a 200 metros sobre o nivel do mar e facía moito que non caía neve. Nas parroquias de Cerdeira o Taboexo é un pouco máis habitual», recordaban en el municipio. En A Cañiza la escena es más habitual, de hecho el pasado noviembre tuvieron ya sus primeras nevadas del invierno. Esta medida obligó a repartir sal por numerosos puntos, en especial en A Franqueira, el monte Paradanta y el alto de Fontefría. En la zona se registraron problemas para circular en la PO-255 y la N-120 en dirección a A Cañiza, la PO-400 a Crecente y As Neves y la EP5005 a Crecente.

En la comarca de O Val Miñor la nieve apareció a partir de los 300 metros. La intensidad provocó que la subida al alto de A Groba se volviera muy peligrosa debido también al hielo. Por tal motivo, los agentes de la policía local de Baiona se vieron obligados a cortar la carretera provincial de Baiona a O Rosal por espacio de dos horas. Los lugares más afectados fueron las zonas altas del ayuntamiento de Oia, en las parroquias de Burgueira y de Loureza, donde algunos viales quedaron intransitables por el hielo y hubo dos colisiones sin gravedad, según informó el alcalde, Alejandro Rodríguez, que se quedó bloqueado con su vehículo en A Valga. La primera nevada del siglo hizo que la altiplanicie de Oia apareciera ayer por la mañana cubierta por un manto blanco, para sorpresa de sus vecinos, y muchos padres optaron por no llevar a sus hijos al colegio.